tag:blogger.com,1999:blog-54579965055444416602024-02-23T16:40:22.896-08:00La Victoria de la Carne.Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.comBlogger129125tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-74851586264791279932016-07-20T01:06:00.000-07:002016-07-20T01:06:32.964-07:00Soltar amarras.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Etimológicamente el
término ingenuo viene a ser "nacido libre". <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">No me convence, lo
modificaría. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La ingenuidad es más un
anhelo, el de creer haber nacido con la capacidad de materializar... ¿qué cosas?
Demasiado... No. Tal vez ilusiones, tal vez una vida. Me sigue pareciendo
ridículo. No quedan papeles que representar en esta absurda tragicomedia; o en
algo que se le parece. Pero libertad, ¿qué es la libertad? La vida ya ni
siquiera es sueño. Es difícil saber si realmente el ingenuo tiene la culpa de
su propia ingenuidad. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">¿Qué fue antes, el río
o el puente? <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Un río nunca es el río.
Y el puente, el puente es la utopía. Utopía es un término rancio. El puente, el
puente puede que sea sólo una vereda entre salinas o una improbabilidad
matemática, una singularidad, eso mismo; me encanta cuando lo dicen (escriben)
los físicos: singularidad. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Es justo valorar los
daños al instante de depurar responsabilidades. Podría decir que el mundo, este
mundo, lo expulsa a uno. Pero tampoco es cierto. Es una fuga. <i>Porque entre el
dolor y la nada él eligió la nada</i>. Una nada desde la que observar, que no
esperar, que no desear; una nada desde la que su ingenuidad, el anhelo del
ingenuo, se refleje en el espejismo, en la línea de sombra, ese espacio mínimo
donde se unen cielo y mar; y que es una promesa que nunca se cumple.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Por creer en cosas que
no existen se pagan los precios más altos. Por creer en lo que jamás existió,
por creer, simplemente, se paga siempre, demasiado; y no todos estamos
dispuestos a enfrentarnos al ogro cabrón que tiende su mano en el peaje. Antes
de cruzar el puente.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Luego están los daños.
Irreversibles. Irremediables. Los daños. Y también está el olvido, peleando con
la memoria, aquello de lo que pudo haber sido; está lo imposible; están los
molinos, duros e inquebrantables; los altos edificios delimitando una avenida
de un lugar en el que la lluvia nunca cae, liberadora, real, más que lluvia,
mucho más que lluvia, mojando algo más que los tobillos, lluvia de agua que
sólo existe para aquellos que creen en cosas que no existen. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Cuando descubres que la
felicidad de los otros es mentira te estás mirando en un espejo. Todo nuestro
mundo está hecho de espejos. Y buscas a quien reprochar, a quien pedir
consuelo; una mano, un beso de tornillo; otro espejo roto; buscas a ese alguien
que te diga sí, con esa misma fragilidad que es la fragilidad común, la que
descubres al pensarte, caminando sobre la grava que ocupa el solar de una villa
en los confines del universo conocido, más allá del océano Atlántico, donde,
empujado por los alisios, planea la última página del último libro de poemas
que nadie jamás escribió y que probablemente no exista porque el origen de su
sentido no es otra cosa que la estupidez, la humana y pertinaz estupidez. Y
buscas, lo buscas, ingenuamente buscando, sin hallar más que la mirada de un
enemigo que se baja de un autobús antes de tiempo por creer que la elegancia y
el decoro y lo civilizado tienen que ver con la cobardía y con la vergüenza y
con la incapacidad de descubrir en los ojos del otro una intención, el
instinto, la pureza de la más justificada violencia. Y miras a tu alrededor, en
ese mismo autobús, donde antes quizá se coloreaba la ilusión de tu propia
ingenuidad, y te encuentras con el hormigón del cinismo, con la devastación
tras los bombardeos, la mentira, siempre la mentira, con el llanto infantil,
con lo que pudo haber sido, con los cumpleaños que no vivirás, el espacio que
nunca ocupaste, el asombro tras caer por fin el telón y mirar atrás y recontar
la historia que nunca hubieras creído vivir. Te encuentras, definitivamente, lo
haces, encontrarte, y desarmado, y sin nada que decir y sin un bálsamo que
aplicar a la grieta abierta en la carne. Te encuentras. Que es lo peor que le
puede ocurrir a cualquier ser humano.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Cuando crees en cosas
que no existen la derrota es más una querencia que una posibilidad. Esa
estúpida sensación. Abrazas la derrota antes de acercarte, antes de saber de
qué color lleva pintados los labios, a qué sabe la pulpa de su fruto. Tiene
también la derrota, en su centro mismo, el alivio del moribundo cuyas terminaciones
nerviosas han acabado, agotadas, por claudicar. Luego está lo que es imposible conocer; lo
irreconocible, por la edad, por las limitaciones emocionales, por valores que
quién coño puede saber por y para qué una vez entendió que debían regir una
existencia. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Está el mar. Eso sí es
una realidad. Y es un sueño. Y puente, hacia ninguna parte, pero puente. Y es
la mar la muerte, porque lo es, la mar es la muerte, pero muerte dulce, a base
de tanta agua salada.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El mar afecta al ser
humano de un modo incomprensible. Todo viaje ha de hacerse siempre por mar.
Aunque sea el mismo viaje hacia la derrota. Los días de mar te aguijonean
profundamente, te enloquecen, te maravillan; al ingenuo el mar lo alimenta con
el yodo de la humedad en el aire, con la plenitud, con la voluptuosa naturaleza
rodeándolo todo y señalando con un dedo invisible la insignificancia de tu
esencia en un cosmos en el que las reglas son básicas, sencillas, casi
insoportables. Llega después uno a un puerto cualquiera, no importa el nombre
que reciba el lugar, un lugar que nunca vas a conocer, porque es imposible que
nadie conozca un lugar cuando apenas va a tener ocasión de dar más de un
centenar de pasos, un lugar cualquiera, y siempre es otro mundo, con sus
casinos, sus bares para gente de mar y sus putas para gente de mar, con licores
para gente de mar, con fantasías para gente de mar; la sensación de tránsito;
la melancolía del último día; la partida, de nuevo la partida, soltar amarras,
la distancia, cada vez mayor, cada vez mayor el balanceo, el aire, cada vez
mayor, las aves perdidas entre dos mundos, despidiéndose, esas aves que siempre
se están despidiendo; de nuevo a la mar.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Pero seguimos aquí,
debatiendo entre si se pueden encender velas en vasos pegados en el techo,
tratando de saber si otro mundo es posible; a pesar de todo. Y no, así no se
encienden las velas, lo dicen en alguno de los mandamientos que no quise leer. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Lo sabes tú, quien quieras o creas que seas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El ingenuo piensa, por
ejemplo, que no todo vale en el amor y en la guerra. En la guerra, la guerra
que no provoca el soldado, que no provoca el individuo, ni hombre ni mujer, en
la guerra, uno mata porque lo han colocado en las justas coordenadas en las que
ha de matar para que no lo maten. Así que mata. Lo hace desesperadamente. Mata,
joder, porque se aferra a la esperanza de un día que será mañana, otro día en
el que volverá a repetir la historia del matar para no ser muerto, y así, hasta
llegar el día, de forma sorpresiva, inesperada, ese día, que será mañana, por
fin sea el mañana en que no deba responder a la necesidad de convertirse en
asesino para no ser víctima. El mañana, tal vez, quién sabe, en el que podrá
amar. No todo vale en la guerra. Tampoco en el amor. En el amor uno ama por y
para sentirse amado y lo hace justamente porque las circunstancias lo han
colocado en las coordenadas precisas en las que ha de amar por y para ser
amado. Así que ama. Lo hace desesperadamente. Ama, joder, aferrándose a la
esperanza de que cada nuevo día, amar, sea por y para ser amado, esperando
quizá, quién sabe, llegar al mañana en el que al final sea la mañana de morir,
morir cogido de una mano, morir ante los ojos que lo miraron largamente y a
través del tiempo, desde el deseo primigenio hasta el cerrar de ojos pasando
por ese periodo en el que lo importante son unas primeras sonrisas, primeros
pasos, preguntas primeras y largos paseos titubeantes. Qué ingenuidad. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El ingenuo piensa que
no todo vale en el amor y en la guerra. Las reglas de enfrentamiento son las
mismas. Son más humanos dos soldados que se disparan que los dos transeúntes
que se cruzan, uno con un periódico bajo el brazo, el otro paseando a un
pequinés, dos transeúntes que se cruzan, sin mirarse siquiera un segundo a los
ojos. Son más humanos dos amantes desnudos en la cama que quienes temen que
desnudarse juntos y tumbarse en una cama les pueda costar tener que amarse y
que ese amor comprometa al juego en el que amarse sea compartir más que la vida
y el espíritu. Son las cosas en la que creen los ingenuos, cosas que no
existen.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Por creer en cosas que
no existen se pagan los precios más altos. Por creer en lo que jamás existió;
por creer, y nada más que creer, velas que se encienden en vasos pegados
bocabajo en el techo, se paga siempre, demasiado; y no todos estamos dispuestos
a regatear con el ogro cabrón que tiende su mano en el peaje. Antes de cruzar
el puente. Otros morimos o matamos. Y ante lo segundo, lo primero.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Supongo que ando
buscando una conclusión, reforzar un argumento que ya de entrada es una ficticia
manera de comprender. Huir. Escapar. Fugarse. Verbos inexactos. Salir, es más
sencillo. Ir de adentro hacia afuera. Salir a la mar. Para bien o para mal. No.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Digo, sí. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Digo: lejos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Grito: ¡soltar amarras!
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Y digo: adiós.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Supongo que ando
buscando otra cosa. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Cuando la encuentre probablemente
será demasiado tarde; cuando la descubra tal vez me sorprenda que también es
una mentira. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-50798316930590005432016-07-03T04:03:00.005-07:002016-07-03T04:03:59.265-07:00Mañana de domingo. Sexta entrada de un diario contra lo íntimo.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Mañana de domingo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">No le veo la gracia.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Dirán que todo esto es
muy negativo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Leo en Público.es la
indignación del humorista/periodista Juan Carlos Ortega por la -una vez más-
polémica portada de El Jueves en la que se puede leer un directo
"Gilipollas" destinado sobre todo a aquellos que en fechas recientes
hicieron uso de su voto en favor del Partido Popular. Argumenta su indignación
de forma elegante, demuestra su inteligencia. Y aunque no se nos hace difícil
intuir que su pensamiento ideológico dista mucho del ideario del partido de
derechas español, su forma de entender el respeto y la educación sin perjuicio
de ese sentido del humor tan particular y brillante, me ha hecho reflexionar. A
día de hoy, España, es un país que tiende a lo conservador. En mi caso, lo
único reprochable, es ese miedo que se me antoja atávico. Aún así, puedo
entenderlo. Albergamos terrores viejos; viejos, pero terrores. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Mañana de domingo. La
encrucijada. Fuera luce el verano con toda su carga de reconciliación, con lo
apetitoso de una orilla asediada por olas purificadoras.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ayer estaba borracho y
después lo estuve más. Tomaba mi enésima copa de Jack Daniel´s en una terraza.
Esta vez en compañía. Sentí la necesidad. Vestía pantalón vaquero negro y
camisa morada de fino algodón; zapatos de piel de ante, una superficie sutil,
la de estos zapatos. Hablábamos, de casi todo; girábamos en torno a un abismo.
Pero sentí la necesidad y amenacé con hacerlo hasta que la sola idea de
reprimirme se me hizo insoportable. Así que me levanté y la miré, determinado,
ni me despedí ni anuncié la intención. La playa estaba llena de sombrillas y
toallas y gente que probablemente en ese momento era feliz. Me levanté y
abandoné la terraza y crucé la estrecha carretera del paseo marítimo y salté
con agilidad el muro hasta flexionar las rodillas y caer de pie sobre la arena.
Caminaba desabotonando mi camisa. No miraba a los playeros a mi alrededor, ni
las sombrillas, ni las toallas. La arena se humedecía y yo ya me deshacía del
pantalón, los calcetines (rojos) y los zapatos. Me quedé en calzoncillos (negros)
y amontoné la ropa. Reía a la vez que avanzaba y no miraba atrás. Para qué
mirar atrás. No sentí fría el agua al contacto con mis pies, mis tobillos, mis
rodillas; si salté ante la siempre ola traicionera que busca el ombligo.
Finalmente me lancé al océano cercano y buceé unos metros hasta que mis
pulmones reclamaron aire; el aire que precisamente yo creía que me sobraba.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">No soy ningún
intelectual. Asistí al reclamo de José Manuel Benítez Ariza e hice lo que creí
oportuno, entregarle lo que soy. José Manuel es un buen hombre, se merece la
fuerza para seguir haciendo lo que hace desde muchísimo tiempo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">No soy ningún intelectual
y no encuentro mi sitio. A la contra del título de un libro que considero muy
bueno de Pablo Gutiérrez, todo, absolutamente todo, es crucial. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Se me amontonan las
tareas domésticas. Me siento incapaz de enfrentarlas. Me llama el teclado y no
sé para qué. Mi futuro literario (¿?), sea lo que sea, está ahora en juego.
Quiero decir. Este momento en el que están ocurriendo cosas (editorialmente)...
he decidido que sea un momento determinante. Es irresistible la tentación del
fracaso. Porque no soy un intelectual.
Mi forma de entenderlo todo pertenece a otro mundo en el que las causas y sus
efectos nada tienen que ver con estas calles y sus adoquines y sus avenidas de
hirviente asfalto.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Las amistades, mis muy
pocos buenos amigos, o están lejos, o tan jodidos como yo; lo que no es
consuelo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Hablábamos de cómo esto
de acudir a las playas con el buen tiempo y desnudarse y sentir esa falsa
libertad responde a una necesidad que debemos a nuestros ancestros, aquellas
criaturas puras a las que tanto respeto guardo. Repetimos el acto de la
purificación con el agua salada, entramos en contacto -descalzos- con la
tierra, paseamos la orilla, a un lado la infinitud del océano, del otro nuestro
nuevo mundo y esa civilización que hemos creado. De poder elegir me mantendría
permanentemente en esa orilla, ver nuestro mundo desde la distancia, aunque no
sea mucha, la distancia.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Amar. ¿Por qué hacerlo?
Quien averigüe la respuesta habrá encontrado al fin a Dios; que probablemente
no existe.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Conservo las
servilletas de ayer como conservo cajetillas de tabaco vacías en esta mesa que
he decido que sea mi escritorio. He llegado a la conclusión de que siempre
escribiré en una cocina. Y también que jamás podré escribir sin fumar. También
me he dado cuenta de que es mucho más divertido escribir borracho. Me niego, sin
embargo, a que mis palabras sean empujadas por el vapor de un vaso helado de
whiskey.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Yo estaba en una de
esas discotecas de negros del fin del mundo en el que bailar es un contacto
permanente y es prácticamente imposible que le quepa a uno la polla en los
pantalones. Se me acercó y ni siquiera recuerdo su nombre, si lo tenía. Fuimos
a la barra y ella quería whiskey del caro y yo se lo pedí y también lo pedí
para mí. Me sugirió que nos fuéramos a otra parte. Ya saben, a otra parte. Y
esa otra parte era la playa, que estaba lejos. Dije sí y le pregunté de qué
manera podíamos llegar tan lejos. Mi marido nos lleva. Su marido nos llevaba,
me dijo. Era una negra preciosa y de cuerpo duro como el tronco de un Baobab.
Bien, tu marido nos lleva, va a ser una experiencia estupenda. El marido pues,
conducía, nos llevaba a follar. Pero caí en la cuenta de que no me quedaba una
sola rupia en el bolsillo y le dije que buscara un cajero. Lo hizo, y llegamos
al cajero, y allí saqué pasta y el imbécil del marido tuvo la genial idea de
atracarme. Yo respondí asediando su nariz chata de negro y sus ojos con una
buena andanada de puñetazos, lo que le dio a entender que aquello no había sido
la mejor de sus ideas. Retomamos el camino hacia la playa en la que su mujer y
yo jugaríamos a la tragedia. Abrazaba su cuello con mi brazo desde el asiento
de atrás para hacerle ver que aquello iba en serio. Y así lo hice hasta que
llegamos a aquella playa que dejó de ser paradisíaca y aquel marido vigilaba. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">No le veo la gracia a
esta mañana de domingo. Será tal vez que no la tiene.<o:p></o:p></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-74579490280972799852016-07-02T10:03:00.000-07:002016-07-02T10:03:45.115-07:00La selva. Quinta entrada de un diario contra lo íntimo.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Le he pedido un
bolígrafo al camarero y ha flipado. Ha flipado más aún cuando le he pedido un
papel para escribir con el bolígrafo que muy amablemente me ha traído. No,
papel papel -para qué quiere un papel-, no tenemos, me ha dicho. Da igual, muchas
gracias, le he dicho, ya con el bolígrafo en mi poder.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">A quién se le ocurre...
en fin.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">He salido, a beber,
nada más. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El Jack Daniel´s me
huele a moqueta de casino; me sabe a humo de Chesterfield. Imagino tras de mí
las montañas cubiertas de vegetación selváticas, festoneadas de rocas lisas y
apetecibles. En esta fantasía el mar es turquesa y su fondo es arenoso. Esto es
Cádiz, pero yo estoy en la terraza del Boardwalk, muy lejos de aquí. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El camarero es un señor
horrible y con bigote; horrible pero amable. Juego a que es Fiona, esa camarera
criolla, fea de solemnidad, con la que una vez acabé enredado en arena fina y
blanca de playa y a la que nunca necesité pedir qué debía servirme. Sin embargo
esto es Cádiz, la ciudad de las ambulancias, la que asesinó mi niñez.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ernest ha venido de
ninguna parte.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Se ha sentado a mi lado
y ha rehusado mi invitación. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Eres patético -me ha
dicho-. Por mucho menos me introduje un cañón en la boca.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El mismo cañón que
deshizo a su padre.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Mis hijos, ¿qué estarán
haciendo ahora?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Cómo deciros que los
siento tanto, que no pude hacer nada.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">A falta de papel
escribo en servilletas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Las gotas de sudor del
vaso empañan lo escrito. Cambiaré de bar.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La salud me acompaña;
yo, que debería estar cien veces muerto.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Tal vez espero a un
amigo que no va a aparecer.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ernest me dice que no
es conveniente.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¡Tú qué coño sabes! -le
digo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Sé que te has
equivocado; al menos tanto como yo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El camarero me mira
mal. Creo que piensa que no tengo dinero para pagar la cuenta. Es un hombre
horrible, pero agradable. Siento un odio especial por él. me voy a llevar el
bolígrafo. Será mi venganza.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Una vez me echaron de
un casino por quedarme dormido en el sofá. El segurata y yo éramos colegas
desde hacía tiempo. Su hermano sirvió en Irak con Blackwater. Le jodieron las
dos piernas. Yo pienso que con las piernas también perdió la polla. no se
pueden perder las piernas sin que te vuelen la polla. Una vez hablamos de ello.
Yo le conté otras cosas, le conté cómo una vez nos colaron una granada en el
Hummer y ésta no estalló. Fue maravilloso. Pero tuvo que echarme; roncaba
descaradamente; era inadmisible. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Manuel jugaba
condenadamente bien al Blackjack, jugaba como un condenado demonio; y yo le
daba todo mi dinero y él se lo jugaba, el suyo y el mío, y bebíamos gratis y
volvíamos con el bolsillo intacto. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">(El camarero quiere que
me largue)<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Con Manuel me hubiera ido
felizmente al infierno; sabía que, o salíamos los dos de él o nos pudriríamos allí.
Abrazo hoy ambas posibilidades. Años antes había estado a mis órdenes. Ahora
volvía a estarlo. Pero ya no era lo mismo. Se jugaba nuestra pasta al Blackjack
y bebíamos gratis.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Yo me había
encaprichado -él también- de Tina. Una negra que resultó decepcionante por no
depilarse las piernas. No se hacen una idea lo que es agarrar los tobillos
velludos de una mujer en el acto sexual en mitad de la selva. Dos noches
después la cabeza de una amiga de Tina apareció ensartada en una pica en mitad
de una extraña rotonda. Son cosas que pasan en algunos lugares de este planeta.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Años después volví a
ver a Tina y ya había tenido tres niños más y no resultaba nada apetecible.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Para bien o para mal
estoy en Cádiz. Qué felices parecen todos. Los envidio. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Escribo borracho. Cinco
Jack Daniel´s en menos de hora y media. Qué felicidad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Dándolo todo por
perdido, la derrota tiene sus momentos dulces. Y recuerdo con nostalgia los
efectos del opio. Si tuviesen ocasión de probar el opio no sentirían esta
hipócrita compasión o asco por mi persona.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">¡Qué cojones saben
ustedes de la vida! ¡Acaso creen que están vivos! No tenéis ni puta idea de lo
que es la vida. No sabéis lo que es amar. No sabéis lo que es odiar. No sabéis
de la voluptuosidad de bucear y observar la infinitud bajo vuestra carne
miserable en mitad del océano. De hecho no sabéis lo que significa ver el
océano. El horror, el horror. el horror somos tú y yo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Voy a cambiar de bar.
Un tipo escribiendo en servilletas es una amenaza. Soy un IMPRESENTABLE. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Aquí todos beben, como
yo; pero nadie escribe en servilletas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">No puedo dejar de
pensar en mis hijos; en cómo no he podido ser el padre que ellos merecían.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Lo próximo que beba
será café. Quizás así me perdone este camarero. No he comido nada. Ni ganas
tengo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Te amo, seas quien
seas; qué más te puedo decir.<o:p></o:p></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-13978122844487741572016-07-02T04:53:00.000-07:002016-07-02T04:53:03.224-07:00Sin título. Cuarta entrada de un diario contra lo íntimo.<span style="font-size: x-large;"><br /></span>
<span style="font-size: x-large;"><b>El sonido que al descolgar el teléfono</b></span><br />
<span style="font-size: x-large;"><b>surge desde los orificios</b></span><br />
<span style="font-size: x-large;"><b>del auricular a la nada: te quiero, te echo de menos.</b></span><br />
<span style="font-size: x-large;"><b><br /></b></span>
<span style="font-size: x-large;"><b>Es como una flor que nace</b></span><br />
<span style="font-size: x-large;"><b>sobre el mármol de una sepultura.</b></span>Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-13505098190499197722016-07-01T00:56:00.002-07:002016-07-01T00:56:53.609-07:00Saltar al vacío. Tercera entrada de un diario contra lo íntimo.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">¿Qué se le pasó por la
cabeza al escritor José Manuel Benítez Ariza para pedirme que presentara hoy su
nuevo libro me es todavía un misterio? Siento Gran admiración por José Manuel,
aunque él, probablemente, ni se lo imagina. Siempre lo he tenido como uno de
los pocos escritores de verdad de esta ciudad en la que son legión los que
pretenden estar continuamente bajo la extraña etiqueta de "escritor".
Muy en contra de lo que siempre había pensado, que yo no era presentador de
libros y autores, acepté su invitación. ¿Por qué? Realmente no lo sé. Hay algo
de sentimental en esto. Su libro de aforismos es precisamente lo que esperaba,
lucidez y oficio. Y, muy extrañamente, muy insospechadamente -hasta el momento
justo de recibir su llamada-, me hizo feliz que quisiera hacerme partícipe de
ese rinconcito en su dilatada y trabajada carrera de literato. Cualquier cosa
más que pueda decir al respecto tendrá que ir a escucharla a la Fundación Aerolítica
de Carlos Edmundo de Ory. En el caso improbable de que el mismo José Manuel
leyera esto: gracias, es todo un honor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Sigo sin enviar mi
nueva novela a la editorial que hace al menos un par de días que la espera.
Volvamos a preguntar, ¿por qué?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Saltar al vacío. Soy un
habitual. Podría decir que siempre me estrellé contra lo malage del asfalto.
Cabría también preguntarse las razones. Existe una única respuesta. Y tiene que
ver con la vida.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Me levanto y caliento
agua y preparo una taza con un sobre de té. Se me ha prohibido el café. Antes
nunca bebía menos de cuatro o cinco cafés diarios. Ahora se me prohíbe. Ahora
ni siquiera me atrevo. A mis treinta y pocos ya se me prohíbe tomar café, como
aquel que preso de una adicción grave para su salud es internado para evitar su
reincidencia.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Pero saltar al vacío.
Los años de la velocidad y la adrenalina se acabaron de forma traumática. Ahora
me conformo con al menos una hora de crossfit diaria. Fumar fumo demasiado, lo
que hace de mis sesiones en el box un verdadero infierno. Un infierno que
celebro con media vomitona y no pocas taquicardias después.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Acostumbro a adornar
estas entradas con la narración de alguna aventura pasada más o menos
inaceptable. Ya que esto es un diario contra lo íntimo es justo que ciertos
pasajes del pasado perfilen al hombre perdido de hoy. Ocurrió en Djibuti.
Djibuti viene a estar en a tomar por culo o en el cuerno de África, según se
mire. Es un lugar que no existe o que existe, el Djibuti que yo recuerdo, en un
mundo irreal, desgraciado y, me van a perdonar, maravilloso. Aquel día, horas
antes de lo que sería el motivo de escribir al respecto, hice subir a los
buceadores porque me escamó un numeroso grupo de aletas dorsales que se
dirigían al interior del puerto desde el océano. Pero eso ocurrió horas antes,
y aquellas aletas, ni de puta coña, tenían nada que ver con simpáticos -en
realidad hijos de la grandísima puta si se topan con ellos en alta mar-
delfines. El caso es que terminé con mis obligaciones a cosa así de las once de
la noche. Así que me vestí y picardeé a quienes no lo necesitaban y nos subimos
a un taxi destartalado cuyo chófer era manco y conducía ciego de kat, droga muy
popular por aquellas regiones. Tras varias vueltas -es curioso, allí también se
llevaban las rotondas, o algo similar- le dije a gritos y en un inglés como de
Barbate colocando el puño de mi mano derecha junto a la bola en su mejilla
llena de droga: ¡Al hotel Sheraton pero ya! Y allí que fuimos. Verán, se
aquellas yo era una especie de skin head con muy mala uva y no poco instinto
asesino. Al llegar a la discoteca del hotel nos recibió un negro como un
gigantopitecus y una belleza somalí o etíope que nos dejó bien clarito cómo
funcionaba aquel mundo sopesando el interior de nuestra cremallera. Luego
pedimos champán y se nos sentaron alrededor no menos de media docena de negras
hermosísimas de rasgos europeos y más que probablemente con el sida ya
devorando sus entrañas. La cosa no pasó de ahí. Pero descubrí que acababa de
descubrir al fin el mundo. La historia continúa y probamos aquella droga y
mezclamos champán con cerveza y la droga no me hizo efecto. Creo que ya no me
apetece seguir contando esta historia.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Podemos dar por descartado el campo.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Digamos que quizá en
aquella ocasión, en el momento de subirme al taxi, también saltaba al vacío. Me
decía mi hermana ayer, estás acostumbrado. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Salté al vacío, tal vez
por última vez. Con el terror instalado en mi pecho y guiñándole un ojo a la
caja de Valium. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ah, no se olviden, esta
tarde tienen una cita en Fundación Aerolítica. Más que por lo que pueda decir
servidor por los siempre lúcidos aforismos de Benítez Ariza. Tiene algo de
esperpento lo de esta tarde, no crean. Jamás he presentado el libro de nadie.
Así que por lo que me toca, puede resultar hasta gracioso, lo que es en sí
mismo un chiste castizo: Estaba Eduardo Flores presentando un libro y...<o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-83968849999872385732016-06-30T04:41:00.000-07:002016-06-30T04:41:41.020-07:00Cadáver. Segunda entrada de un diario contra lo íntimo.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Escribir esta segunda
entrada del diario contra lo íntimo se me hace más que difícil imposible.
Porque uno quisiera escribir sobre lo que no se puede escribir.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El dolor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Veo a través de estas cristaleras
lo siniestro de un cielo ambiguo sobre las marismas. Con conucos apagados, son
apenas negras perturbaciones en el aire, recortándose en el cielo; pienso en lo
demoledor del impacto y en la fragilidad del individuo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Nada que ver por
supuesto con descubrir a mi hermano Valero Cortadura presentando su primera novela.
Sé que ha creado algo grande. También él lo sabía, allí sentado, respaldado por
las palabras que antes depositara sobre el vacío de la nada. Aquellas palabras,
bueno, no justamente esas, si no las que salían en forma de voz, me
reconfortaron. Verán, ayer fue un mal día.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Sobrepasa a cuanto
aspira detallar este diario absurdo hacer pública la desdicha.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Antes que esto fuera la
victoria de la carne era la muerte del suspiro. Imagino que ahora debería ser
otra cosa. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Los coches que circulan
por la autovía van todos y a toda prisa hacia una muerte segura. Observo desde
la muerte misma, desde los despojos que juntos y alguna vez formaban un hombre.
No sé si existe un tango titulado Perder. Eso del tango me trae de la memoria
aquella película de Darín, El mismo amor la misma lluvia. No recuerdo si el
título es exactamente ese o parecido, la pereza me impide buscar en Google.
Pero Perder, qué gran título para un tango. Hay que se saber perder, dicen, y
un carajo, digo yo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Se me ocurre que perder
y errar son dos verbos estrechamente relacionados. Los conozco bien.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Volvía en autobús y
tarde y en mi regazo reposaba cerrado <i>La
escapada</i> de William Faulkner. Lo que dejaba atrás era el universo. Nadie
entendió que aquello había sido mi universo. Este autobús hacia ninguna parte
llevaba un cadáver hacia la nada que es el lugar que habitan los cadáveres.
Presiento que ese autobús me llevará más y más lejos cada vez, hasta no ser ni
siquiera cadáver, hasta no tener nombre, hasta no ser recuerdo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Le he dicho, a alguien:
"cariño, cada día me quiero menos y peor. Espero que no te escandalice que
te diga que algún día acabaré suicidándome, como Hemingway, pero de una forma
más elegante". No me ha tomado en serio, y hace bien. Pero es tan cierto
como que hoy soy un cadáver. No sé si Schopenhauer ha tenido que ver algo en
esto, o Chateaubriand, o cualquiera que en algún momento me hizo ver aquello de
la desaparición voluntaria, en el fondo, una especie de arte.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Que
la vida iba en serio... </span></i><span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">al contrario de Jaime Gil de Biedma
lo aprendí demasiado pronto. El dolor con sangre entra. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Hablaba Marina Rosado,
sí, creo que era Rosado, y si no da igual, sobre la vergüenza de la mujer de
ser mujer, de cómo la sangre periódica era motivo de vergüenza porque era una
herida, de que ser mujer era motivo de vergüenza. Me pareció tan terrible como
cierto. Yo envidio a la mujer, pese a todo, pese a este lastre mío de la
masculinidad y su violencia implícita, lo que me dibuja como un macarra por
decir que hay quien se merece que le rompan la cara. Quienes alegan su civismo,
quienes se escudan tras él por saberse miserable, merecen que se les rompa la
cara y se les diga, con la tranquilidad propia de quien sabe que su civismo no
es más que la superficialidad de un corazón impuro y deteriorado por vivir una
sociedad de mentiras. De hecho estoy determinado a romperle la cara a alguien
en particular en cuanto me lo cruce por mi camino. Y no crean, no será nada
grave, no será escandaloso, tendrá consecuencias -esas consecuencias, hoy,
siendo un cadáver, las ruinas de un organismo, no me producen la más mínima
inquietud-, pero será justo. Entonces sí seré un macarra, entonces sí seré un
animal, el mismo animal que ama por instinto y con todas sus fuerzas, el mismo
animal que para alimentarse prefiere la carne poco hecha, el animal, en
definitiva, que sabe que en el fondo todos somos animales encerrados en jaulas
de asfalto, hormigón y lo hipócritamente correcto. La civilización es una
distopía creada con muy mal gusto. La civilización oculta el respeto hacia los
demás con una serie de códigos malintencionados. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Sigamos con este diario
contra lo íntimo cargado de ficciones. Una vez me encerré en una habitación del
hotel Ramada de Dubai -habitación que era más grande que mi piso- con un buen
amigo y media docena de mujeres -cuyos vestidos y ropa interior no se pagaba ni
con todo el dinero en mi cuenta y en la de mi amigo- dispuestas a hacernos
felices durante tres días y dos noches. Sé que esto me hará terriblemente
impopular y que recibiré el odio de muchas y la envida de otros. Si sirve de
algo hoy no lo haría, y si no sirve, me la suda bien por lo bajo. Durante ese
tiempo me gasté como unas trescientas mil pesetas y sólo me comí una
hamburguesa. Ah, sí, pagué cincuenta mil pesetas en una botella de Chivas que
resultó ser una verdadera bendición. Podría alegar una especie de locura
transitoria generada quizás por no pocos actos bastante más deleznables y que
en cualquier otro contexto serían motivo cuando menos de cárcel. Supongo que
cuento todo esto por el dolor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El dolor, el verdadero
dolor, es una muesca imborrable en la espina dorsal. Es permanente. Asocio el
dolor a una forma de amar, la mía. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Se me viene a la cabeza
Valero y su libro. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Recuerdo leer Cien años
de soledad de García Márquez borracho y con una joven rusa masajeándome la
espalda. Me enamoré de ella, me olvidé de que era una puta más que
probablemente en contra de su voluntad que disimulaba su más que probable
amargura brindándome una dedicación aparentemente tan pura que no me quedó otra
que creérmelo. Así que me enamoré de ella y lloré cuando después de los efectos
del Chivas y de todo lo demás supe que ya no volvería a verla y que su destino
estaba condenado. También eso me produce dolor. Parecerá mentira, pero aquella
experiencia marcó en mí un antes y un después. A mi colega le ocurrió igual, ella
era china. Yo también disfruté de sus cuidados. Pero se dio que yo me enamoré
de la rusa y él de la china. Si él lloró nunca lo sabré. Hoy sigo asociando
Cien años de soledad y a García Márquez con aquella joven rusa, con la locura
de la que yo procedía hasta caer en sus brazos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ya no estoy tan seguro
de acabar en el campo este fin de semana. De hecho ni siguiera estoy seguro de
que exista un fin de semana, de hecho no estoy seguro de saber qué es un fin de
semana. Estoy seguro de amar a una mujer más que a nada en este mundo. Estoy
seguro de amarla por encima de mí mismo. Estoy seguro de que es la mujer más
mujer y más extraordinaria de cuantas he conocido, y para bien o para mal, y
sin querer resultar excesivo, he conocido a muchas y amado a muchas. De lo que
no puedo estar seguro es en lo del campo. Lo necesito, eso sí. Lo necesito
porque recuerdo que hace unos meses me emborraché y fumé opio hasta vomitar
allá en una isla perdida del mundo y me desnudé para escalar por unas rocas de
origen volcánico que pedían a gritos un acto puro de humanidad. Yo estaba loco
entonces, no mucho más que ahora, cargado de Valium 10 mg hasta las orejas.
Estaba felizmente loco a partir de lo infeliz que me había producido estar
excesivamente cuerdo. No soy un macarra, señor mío. Soy un hombre pleno de
humanidad, un hombre bueno me atrevería a decir, un hombre dolorido,
traicionado por la vida, un hombre que arrastra con el recuerdo de haber matado
porque las circunstancias así lo requerían, un hombre que no se ve, que se
esconde tras el hombre que todos creen ver, soy un hombre que sabe del valor de
encontrar un tesoro en la jungla, soy, en definitiva, un hombre derrotado cien
veces y otras tantas renacido, soy quien ha muerto, otra vez, y soy, esto
deberías tenerlo muy en cuenta, a quien debieras temer hoy más que a la muerte.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Y entre que redacto
todas estas ficciones -ficciones o no- íntimas postergo la obligación de
entregar el original de una novela a una editorial que lo espera. Ya ven. Los
muertos no entienden demasiado de prioridades. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Tengan un feliz día. O
no, que tampoco me importa demasiado. <o:p></o:p></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-27170362545334292632016-06-28T04:10:00.000-07:002016-06-28T04:10:23.902-07:00Mandarlo todo a tomar por culo (primera entrada de un diario contra lo íntimo).<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La intimidad es ese
lugar imaginario en el que uno intenta decirse quién es con menos miedo al daño
previsible. Mi intimidad es un estado permanente de angustia. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Decidí hacer esto,
escribir a modo de diario en el que todo no sería más que ficción, en el mismo
momento en que ella me preguntó que qué tiempo hacía y yo miré a través del
visillo y le dije, sin mirarla y sin más, panza de burra; luego sí la miré, y
estaba preciosa y me estremecí y no entendí nada porque sentía una ausencia
total de mitología, de leyenda fundacional; y me sentí perdido. Tal vez me
sorprendió la oscuridad exterior, y recordé ese estado permanente de angustia
que es mi intimidad. ¿Por qué no romperla en mil pedazos? No vale un carajo la
intimidad; como Shakespeare, está sobrevalorada.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Esto tan poco original
es un diario que lucha contra lo íntimo. Jamás prometería regularidad. Esto es
un diario de lo irreal, fruto más que probablemente de algún tipo de daño en el
lugar en el que debieran ordenarse las neuronas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Proyecto pues mandarlo
todo a tomar por culo este fin de semana. No, no es una nota de suicidio (no
madre, no hermana, no lo es, al menos no todavía). Es la expresión que mejor se
ajustaba al hecho de querer uno dejar la ciudad e irse al campo, el monte,
donde, sin duda, y al raso, bajo las ramas de los árboles (sueño con
alcornoques), al compás que marcan la luna y el sol y la armonía visual de las
nubes viajando empujadas por el viento; a la determinación de no ser nada o ser
únicamente definido por su condición de bípedo ligeramente tecnológico ante lo
imprevisible de lo natural. No sé si lo llevaré a cabo. Hace demasiado tiempo
que se me niega (que me niego) hacer de la mochila a mi espalda mi armario y de
la naturaleza mi hogar. Eso quiere decir que en algún momento me desnudaré y
pasearé descalzo sobre el follaje o la tierra y me recordaré que así llegué y
de tal guisa, un buen día, me marcharé. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Panza de burra le dije.
Me preocupan sus preocupaciones y su misterio. Cuando aceptas a una persona, a
cualquiera, el demonio se disfraza de todo lo demás. Es la oscuridad exterior.
Soy un completo inadaptado. No acepto -o lo hago más mal que bien- a la mayoría
de las criaturas que pasean algo más allá de la plaza bajo mi ventana (por esa
terrorífica avenida). Son sospechosos de llevar una vida que yo no llevo, que
tampoco quiero. Siempre hubo una ventana y una calle y personas que la
caminasen. Será tal vez por eso que me escapaba, emocionalmente inestable,
herido (cada vez de mayor gravedad, creo, cumplo años). Tal y como entendemos
el verbo madurar me parece una aberración. Fue a un conocido que le dije (ayer,
en la más inverosímil de las conversaciones) que para cierto equilibrio
necesitaba un proyecto de largo recorrido (novela), deporte de cierta
intensidad y sexo. Esto último lo dije sin poder evitar una estúpida
sonrisilla. ¿Por qué lo dije? No había necesidad. O quizá sí.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Cuando este fin de
semana -y si se da el caso de que marcho y me encuentro libre de mí mismo-,
respire el aire de la montaña, pensaré en esas tres necesidades y otras. Y en
la madurez. En la que me falta y no quiero. En la inestabilidad. Buscaré mi yo
primitivo, ese ser que no teme a nada y que desconfía de la noche y sus
peligros y sabe cuidarse de ellos. Aquí, entre vosotros, uno no tiene ni puta
idea de nada. Es por eso que os meto en historias y os pregunto. Para nada.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Las lecciones del amor
siempre conducen al desconocimiento. Se parece demasiado a la religión. Y la fe
es un bicho esquivo. Las lecciones del amor llevan a uno a rechazarlo, a
negarse a pagar el precio por sentirse enamorado.<o:p></o:p></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-83313555565128651892016-06-27T02:25:00.000-07:002016-06-27T02:25:23.676-07:00Decepción.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Es tal vez la decepción
una mezcla de tristeza y rabia. Motor de preguntas imposibles, la decepción nos
paraliza como un golpe en la cabeza y desde atrás. Ocurre luego que ya no tiene
cura. Habrá quien diga que nos hace más fuertes, o que cercena no pocos flecos
de una ingenuidad que hasta entonces no nos molestaba -o no demasiado-, sino
que creíamos necesaria. La decepción afecta a las creencias, a lo profundo del
ser, cuando son profundas la creencias, cuando uno se sabe ser sobre lo que
tiene y se conduce tratando de ser honesto no sólo con uno mismo, también con
cuanto le rodea. Tras su llegada, un beso helado como el impacto con un iceberg,
la mentira se hace fuerte y lo que uno abrazaba y que llamaba esperanza vuelve
al rincón donde se esconden todas esas fantasiosas ideas que acostumbramos a
llamar utopías. La decepción es quizá la madre de todas las derrotas, porque no
te mata; en el mejor de los casos te deja la piel mate y te permite caminar y
la mirada se vuelve un tanto gris y se lanza uno a la calle y los rayos de sol
son como insultos y la vida de los demás, que ni siquiera son compañía, se
observa y se siente como una amenaza y como una pregunta relacionada con el
tiempo y su acabose.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Hay quien combate la
decepción con unas gotas de ginebra o de bourbon, otros recurren a la brujería
de los ansiolíticos. Otros reniegan de su propia naturaleza, culpable de todos
los males padecidos y por sufrir. Habrá también quienes busquen
desesperadamente el calor de otras pieles sin brillo en un pacto patético y
finalmente dañino. Y es que la decepción conduce inevitablemente a la soledad.
No existe sin embargo quien pueda combatirla con eficacia, resulta ridículo
lanzar puñetazos a la carcoma decepcionante.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Combatí personalmente
los resultados del referéndum en Gran Bretaña con el mismo cinismo que
aborrezco en los otros que no son yo: "al fin y al cabo la diferencia
había sido tan corta". Cinismo en estado puro. Seguir los acontecimientos
era como mirar a través de la lente de un microscopio. Al otro lado y en grande
se dibujaba una geometría similar a la del virus del ébola o la de cualquier
otro virus cabrón que conduzca a la muerte. Pero no era un virus, somos
nosotros. ¿Con qué argamasa construir o proyectar nada? Y hablan en tertulias
de economía, de comercio, de plazos, de medidas. ¿Qué solución se busca a lo
que no tiene remedio? La mezquindad humana vive en nuestras células, flotando
en el citoplasama, junto a la mitocondría, los lisosomas, el aparato de Golgi.
Lo que pudo haber sido fue decepción. Profunda, triste y rabiosa decepción.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Las decepciones nos
hacen criaturas viles. Es tal el dolor que conllevan, aquello del tigre con la
espina clavada entre las almohadillas de la zarpa. A ver quién coño se la quita
sin ser despedazado en el intento. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Para una parte
considerable de la ciudadanía española los resultados de estas últimas elecciones
han sido decepcionantes. Nos hemos levantado de la cama que nos recibió con un
mal sueño y amanecemos zombificados. Se leyeron insultos, improperios, se
gritaba en el desierto, lloraba uno caracteres en Twitter o Facebook, dije:
"al PP sólo le falta follarse a todas y cada una de nuestras madres (por
el culo) para empezar a pagar responsabilidades políticas". Para nada. ¿Habrase
visto burrada mayor y menos necesaria? Era la decepción y su paso por las arterias
empozoñando las cavidades del corazón. Llegaba, la decepción, por saber que se
nos puede hacer cualquier cosa, que se nos puede agredir, sin que nadie pague
por ello y sin que esos nadie pierdan la posición de privilegio desde la que es
fácil y les es necesario, agredir, hacernos cualquier cosa. Contra esto ya no
cupo cinismo posible. ¿A quién vamos a culpar? ¿A nosotros mismos? ¿Qué somos
nosotros? ¿Acaso tuvimos la más mínima posibilidad de llegar al momento en que
aceptar la culpa nos hubiese aliviado? <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Son preguntas. Las que
nos deja la decepción. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Es también la decepción
resultado de la deslealtad, del derrumbe. Decepcionan los gestos y las palabras
de un presente olvidadizo en la inmediatez del vagón cuyo interior carece
aparentemente de asideros. La decepción ocupa en su estudio un lugar misterioso
dentro de las ecuaciones en las que encontramos variables de tiempo y espacio. Y
-ya en el vagón y el vagón en movimiento- tal vez te lanzas impulsado por el
espejismo hacia el final y cierras los dedos en torno a lo que creíste -el
vagón se precipita por el túnel oscuro y sin frenos- una forma de mantenerte en
pie durante el viaje el tiempo suficiente (suficiente para qué); hasta que al
llegar la ilusión se desvanece, decepcionante, cerrando la mano en una especie
de éter, una mano ahora dolorida y asediada por la urticaria de saber lo que
nunca se quiso averiguar. Y si verdaderamente es la decepción esa mezcla entre
la tristeza y la rabia, tratar de alejar esta última para conservar irremediablemente
la primera, al final, resulta mucho más elegante, es infinitamente más
elegante, quedarse respirando nada más que la tristeza. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Será que la rabia se
acerca demasiado a toda forma de mal. Y la tristeza, bueno, la tristeza apenas
provoca daños colaterales, no deja cadáveres por el camino. El cadáver eres tú,
y tú te mueves. <o:p></o:p></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-13262064963746557702016-06-12T03:42:00.000-07:002016-06-12T03:42:08.058-07:00Anoche.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ya circula por ahí; es
expuesta a sus primeras lecturas críticas. Después de tres años no sé qué
decirle, <i>hemos pasado lo nuestro</i>. Se
lo tienen que decir otros, sin menoscabo del amor que siento por ella y cada
una de sus páginas. De vez en cuando vuelvo a soñar con ellos y su mundo, el
mundo -que creo desconocido, es el motivo- a través de mis ojos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Vivir caminando sobre
el alambre tiene sus ventajas. La confusión es un estado de permanente interrogación.
Y siempre dije que este era un oficio de la duda. También cuando miro los
poemas -que no leo, ni siquiera toco-, ahí, encuadernados, lastimados por la
vergüenza de quien creyó en su necesidad, siento la obligación de odiar la mano
que los compuso por lo incómodo del ejercicio autocompasivo. Fue quizá por ello
que decidí esquivarlos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Los comentarios llegan
y lejos de la afectación que esperaba me mantengo fuera de todo. Al margen. Las
palabras y voces en el texto me son ajenas. <i>Puedo
dar por acabado esto</i>, me digo, <i>ya lo has
perdido todo</i>, sentencio, <i>otra vez. </i>Qué
más da. Podemos volver a empezar. E punto F, haga de nuevo su apuesta. Hay
quien no puede vivir si no es fugándose de los sinsabores de la realidad, de la
impureza en nosotros, del asfalto y el hormigón.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ya dije que cuando José
Alberto López te llama has de decir sí, sea por la responsabilidad de asistir a
la obligación que impone el arte de quien maneja un verdadero talento, algo que
por mucho que insistamos, no, no es abundante. Así que creo oportuno exponer y
alardear de amistad artística y virtual: CROMOmagazine 12, GRIS. Acompañando a
la fotografía de Aleix Plademunt. Qué decir: gracias, siempre a ti.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiCmtx0Zu_DKWkXHaUB0ecEFsUUoPDk4WN8VRaKLjUZGUBSuuXNxUOTEqMgw4HEt-ZbrN-FCB7J_XOftig0BYubQkKYCMZ8CXskZXpMYtKqIlV17cFegwdteui8dNu2M04LzoP34ODh8NaS/s1600/13301285_791466054287827_3255513774337289039_o.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="476" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiCmtx0Zu_DKWkXHaUB0ecEFsUUoPDk4WN8VRaKLjUZGUBSuuXNxUOTEqMgw4HEt-ZbrN-FCB7J_XOftig0BYubQkKYCMZ8CXskZXpMYtKqIlV17cFegwdteui8dNu2M04LzoP34ODh8NaS/s640/13301285_791466054287827_3255513774337289039_o.jpg" width="640" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Despuntaba el alba, tan
lejos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Bebía, sentado
-disfrutando de la penumbra, del plomo en las entrañas-, cuando llegó, un don
nadie como cualquiera. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Yo la miraba. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Las aspas del ventilador
removiendo humo, el vapor de las copas sobre la música de otro tiempo; la
batahola tras la barra clandestina, la borracha y danzarina y exótica Suzanne
atenuada en el centro del cosmos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Sé de lo que hablas
-dijo-; también estuve enamorado.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La mesa baja, cómplices
desconocidos, uno frente al otro -yo también...-, y en medio el cenicero que
apenas se usaba para erigir una pirámide de ceniza. En la calle y solo aullaba
el perro de las noches en los barrios sin luz; de aire desoxigenado por el
vómito de las chimeneas de la fábrica. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Si nos despedíamos no
era porque fuera hora de cerrar. Amanecía. Ella seguiría allí. Y él ya se
alejaba, taciturno.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Cuánto lo siento
-mentí.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Asintió.<o:p></o:p></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-66475774869188421372016-05-21T04:48:00.000-07:002016-05-21T04:48:57.959-07:00Tiempo detenido<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La imagen es la de un
muchacho de catorce años que besa a una muchacha y que, de forma sutil, como si
no lo hiciera, coloca las manos a ambos extremos de sus caderas mientras ella,
con las suyas, atrapa su rostro. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Al vértigo y al
silencio primeros se impone la fascinación, luego la admiración, y finalmente,
la envidia.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Piensa uno en ese beso
como en el mejor de todos los besos. La contención, el tiempo detenido, la
ausencia de un mundo contrario al beso. La imagen es un espejo de los años
abandonados. La felicidad en ella es toda, allí, concentrada. Cómo no sentir
envidia. Y cómo negar la fascinación. Melancolía.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Para ellos, jóvenes
amantes, una expresión como tierra quemada es como cualquiera de las sinrazones
de la razón que se malvive a partir de cierta edad. Habrá quien diga que no,
que la magia... y yo respondería con esta imagen. Quién podría atreverse a
negarla. Al fondo se recortan las montañas, tan verdes y puras, con un cielo límpido
y puro. Se besan sobre un piso de macadán grafiteado desordenadamente y en
negro. No me puedo detener en las palabras. Es el mundo de la imagen. Y la
pareja adolescente, la fotografía ligeramente descentrada, ocupa el centro del
universo. La naturaleza los contempla, no me cabe la menor duda. Y habrá quien
diga de la magia que... resulta que sí. No podemos preguntarles a ellos.
Conocer la respuesta, como yo mismo creo conocerla, ahora, en este momento,
para quien la conoce porque es un recuerdo, un recuerdo, un recuerdo, un
recuerdo, para quien se sabe inmerso trágicamente en la mentira y conoce la
respuesta a una sencilla pregunta sobre la magia porque la recuerda, la tierra
quemada es más herida abierta que cicatriz, más martes que viernes, más
Lorazepam que Durex. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El muchacho le saca una
cabeza, así que ella ha de alzar la suya para buscar y encontrar sus labios. Es
una conmovedora determinación. Observo el gesto y traduzco soy mujer. Pero
también veo las manos del muchacho. No quiero mancharte, dañarte, ni siquiera
alterar ligeramente tu delicadeza, intervenir en el valor de tu cuerpo
entregado y tu esencia pegada a la mía, y traduzco, soy hombre. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">A él le cuelga una
pequeña mochila de la espalda cuyas asas son cordones de nailon. No le pesa.
Todavía la mochila está casi vacía. En ella ya van sinsabores y felicidades.
Sería injusto decir que de baja intensidad. Calzan zapatillas de deporte y
visten pantalones cortos. Me digo, son para correr. Abriga el torso de la
muchacha una sudadera. Él muestra sus brazos musculados y definidos en una
camiseta deportiva sin mangas. Dioses, cómo se besan.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Apuesto a que él
abandonaría el mundo por ella. Apuesto a que ella, por él, abandonaría el
mundo. Es tan pueril, tan ingenuo, tan cursi. El juego es el juego. Lo harían.
Y joder, no sería yo quien pusiera la ciencia en contra, quien dijera palabras
como artificio o adolescencia o química. Apuesto a que él dice te quiero y a
que ella lo dice también. También apuesto a que lo dicen de verdad. Apuesto a
que es verdad y a que él abandonaría el mundo por su cuerpo menudo y por su voz
de niña mujer y a que ella lo haría por sentir eternamente el cuidado de las
grandes manos de él en su cadera.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">También deja la imagen
un sabor amargo a quien la observa desde la perspectiva lamentablemente
privilegiada en la que el mundo no aprueba la magia, en un mundo en el que ni
mucho menos el amor con sus cuatro letras es suficiente, ni siquiera necesario.
La imagen habla directamente del paso del tiempo y de los anhelos presentes y
de las presentes necesidades. Cuando el cinismo de la sociedad en la que nos
movemos ahoga, asfixia, vuelve tristes los ojos y apenas dan ganas de afeitarse,
ver la imagen de los dos que se besan y aman es una forma más de inmolación.
Resulta peor cuando uno tiene la belleza por creencia. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Los veo ahí y me
resisto a pensar que el momento no es más que el fruto de una casualidad. El
azar, sin otra fuerza que se pueda considerar, los ha puesto ahí, les ha
concedido su espacio y su tiempo, en un lugar cualquiera del planeta, de uno
más en uno de los muchos sistemas solares de una galaxia entre millones de un
universo que sabemos infinito. Me niego a creer que la dicha en el beso, en ese
beso y no otro, responde a un sencillo uno más uno que siempre da dos. Más que
nada porque sumo y vuelvo a sumar y siempre me da uno. Una extrapolación a lo
cósmico asusta como lo hace lo desconocido, lo oscuro. Después ocurrirá que no
habrá nada. Es sencillo. E igual de maravilloso, con todo su dolor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La melancolía debilita
los huesos y los miro una y otra vez como se haría con una obra de arte. La
tierra quemada es zona volcánica, no deja de humear y amenazar. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Cómo los envidio, a
ellos, ahí, tan ajenos a los vapores insalubres, a lo infraestructural, a las
unidades de medida, a los relojes; cómo me fascina la naturaleza de los
movimientos que no se pueden más que imaginar, del antes y el después, y sobre
todo el contacto y su humedad y la piel estremecida y el calor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Cuando nació tenía los
pies grandes y los ojos siempre muy abiertos para atrapar el mundo. Su padre lo
miraba sin saber que su carne crecería hasta ser un hombre. Su madre,
probablemente, no lo quería saber. Se enfrentaban a la misión imposible de
incorporar a la vida un pedacito más de vida. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Miro la imagen
asombrado, primero dominado por el vértigo, por el silencio contemplativo, por
la fascinación y la envidia y la melancolía después. La muchacha alza la cabeza
y acaricia su rostro en el beso. Él, que siempre tenía los ojos tan abiertos,
ahora los cierra.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Bien hecho.<o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-37298898289412408282016-04-04T09:42:00.000-07:002016-04-04T09:42:22.065-07:00Entre el anonimato y la gloria.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Surge algo, una extraña
química se activa, la piel se recoge; cuando ocurre que el deporte se fusiona
con el arte, cuando el movimiento se vuelve poesía, pintura y escultura, esa
musicalidad de las formas; cuando vemos al artista, al deportista, poseído por
la armonía entre el cuerpo su tiempo y su espacio; cuando Javier Fernández se
desliza sin esfuerzo aparente y entregado a la causa mayor y necesaria; ya
digo, surge, para conocedores e ignorantes de su ejercicio o de su obra, genuina,
la admiración, inevitable; algo más, la fascinación más pura; no por el hombre,
el individuo -que nunca es nada, solo y sin intención, un accidente quizá-,
sino por la magia desplegada, por el regalo de esa magia y por el creador
voluptuoso que lo hizo posible.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<iframe width="320" height="266" class="YOUTUBE-iframe-video" data-thumbnail-src="https://i.ytimg.com/vi/YVEJOmLG31s/0.jpg" src="https://www.youtube.com/embed/YVEJOmLG31s?feature=player_embedded" frameborder="0" allowfullscreen></iframe></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Era el fin de semana
del clásico. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Pero los clásicos, en
fútbol, se dan, al menos, un par de veces al año. Y de ellos poco se puede
esperar. Además, pasa que a la poesía la matan los euros y los dólares, que el
arte se mancha, que el deporte se corrompe, el momento cumbre de la pasión
reventado por la intrusión de la goma de lo estrictamente pecuniario, muerto el
hechizo. El fútbol deshace su promesa según pasan los años. Uno se conforma con
recordar vía Youtube las últimas baladas de Zizú o Ronaldinho, que es como contemplar
lobos en jaulas. Y así, viajar hacia el pasado, a otros nombres, relacionados
con la infancia, con el aprendizaje del deporte en la ingenuidad de la tijereta
y el gol de plancha y la palomita de Paco Buyo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Javier Fernández -no me
canso de ver los ocho minutos veinte de Boston- se desliza como impulsado por
miles de millones de partículas subatómicas, su cuerpo parece sumergido en esa
ficción del éter, y no sigue la música de Sinatra, es la música la que se
adapta a su contorno, a la expresión de su cuerpo, siempre en movimiento,
siempre cadente, las cuchillas afeitando con elegancia la gélida superficie,
trazando el dibujo perfecto de quien patina como sueña, del que baila en medio
del cosmos, alborotando la existencia de quienes lo siguen en vivo, que tal vez
no pueden creer lo que presencian, un público estremecido que jalea como
hinchada y que celebra cada verso, cada pincelada o cada nota, sobre el hielo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Independientemente de
la gesta, del triunfo, hay algo más. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Porque para según qué
cosas la victoria no es más que una meta, y, ¿quién quiere llegar a donde no
puede existir más que el vacío del fin? No. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Javier Fernández parece
conocer el secreto. Es verdad que después se emociona y se envuelve en la
bandera de todas las disputas y que celebra. Pero no. El secreto que conoce
Javier se vislumbra en torno al minuto tres veinte. Dura a lo sumo un segundo,
un primer plano fugaz, como una caricia perentoria e inesperada, una acción que
nos descubre el verdadero interior del ingeniero del sueño, lo que está
ocurriendo realmente, no lo que vemos, que es maravilloso, sino lo que ocurre,
de forma imperceptible, y que es quizá la madre de toda la belleza recreada
durante milenios: sonríe. Y lo hace en el mismo mundo de los atentados
terroristas, del hambre y de las guerras. Javier Fernández descubre su sonrisa
-disfruta envidiablemente-, no sabemos si por descuido o por el sencillo placer
de dejarse, como lo estaba haciendo, llevar por aquello que ante la ignorancia
o la incapacidad para explicar acordamos en llamar musas o inspiración; una
parte más del regalo -la parte, el sentido, una verdad-, es esa sonrisa. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Enfrento esa sonrisa a
la ya más que retuiteada fotografía del vestuario de un Real Madrid victorioso.
No hay color. El arte, en el deporte, es otra cosa, y ya pasado el clásico
(léaselo muy entrecomillado el epíteto, pobre y deslucido), la maravilla,
insisto, el prestigio, el arte, lo encontramos en un muchacho que ahora danza
entre el anonimato y la gloria.<o:p></o:p></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-30286692704207086082016-03-28T03:35:00.000-07:002016-03-28T03:35:50.578-07:00La procesión de la muerte.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Pasión, muerte y
resurrección de Cristo. Es difícil evitar ese segundo en el que se pasea y se
descubre, como salida de la nada, la procesión con su banda y su penitencia y
el paso y la imagen poderosísima de vuestro señor de todos o de su madre bajo
palio y meciéndose solemne por las calles estrechas del siglo XXI; evitar la
turbación. Cuando eso ocurre y es, la imagen, la de ese Cristo, su presencia
dolorosa, me pregunto <i>¿Quién eres? ¿Por
qué eres?</i> Y procuro marcharme, para no ver todo lo demás.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXAJZVCH8JXLC0ZZxh4INRfNCY_pz7XTAh5Ev2aYKmgPkeq4qxqi0QXps2C1pO_VeoaCb5VNsrfoxZvEr17mzTE44tLrw4YVR1rDoKZ432p6JxhuTrKOrLdFRqgCIA3xSwddvoAG0GihdA/s1600/GUL12227.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXAJZVCH8JXLC0ZZxh4INRfNCY_pz7XTAh5Ev2aYKmgPkeq4qxqi0QXps2C1pO_VeoaCb5VNsrfoxZvEr17mzTE44tLrw4YVR1rDoKZ432p6JxhuTrKOrLdFRqgCIA3xSwddvoAG0GihdA/s640/GUL12227.jpg" width="380" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">La procesión de la muerte. José Gutiérrez Solana. 1930. Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">Y todo lo demás es
quizá el Gólgota en Idomeni. Es un nombre nuevo para mí. Me gusta su sonido.
Sin embargo nada dice la sonoridad del nombre del mal que se encierra entre
alambradas y sobre el lodo, del hambre y del frío y del desamparo. Idomeni ha
de significar algo así como </span><i style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">sería mejor
que se murieran, no vaya a ser que con ellos espere, paciente, la bestia.</i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: 12pt; line-height: 115%;">
Todo lo demás es, tal vez, Bruselas; el eco del estallido, la quemazón como
rastro de la onda expansiva, los miles de clavos y tornillos y restos de fierros
lacerantes de la metralla; ay, Dios, y la sangre, que no sale ni con jugo de
margaritas ni con el tungsteno del núcleo de un cinco cincuenta y seis, la
sangre que riega desde el inicio los campos de esta Europa y que pensamos
tierra de todos y libre y valiosa y lo que es más importante, justa, sobre
todas las cosas, así que la sangre, que perdura, para vergüenza de los hombres,
el fin de todas las guerras. Pongamos que todo lo demás es la necesidad y la
tristeza de quienes no verán el final de la crisis y lo saben, en los barrios
más humildes de la ciudad. Todo lo demás que no sea el rostro de ese Cristo que
veo pasar tan fugaz como un neutrino, incomprensible en todo su ser; la
paradoja de adorar dioses e hijos de dioses en el siglo más descreído y
estúpidamente racional e ignorantemente ateo.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">En Idomeni sólo se dan
la pasión y la muerte; la resurrección es imposible, en esta vida. Uno ha de
esperar a la otra, allá donde deben de encontrarse los que se inmolan en nombre
del Dios verdadero. De aquellas fue un judío torturado y asesinado por miedo. No
debió de entenderlo del todo, y probablemente, al llegar a donde quiera que
llegase, al cielo quizá, antes de sentarse a su derecha, preguntó al Padre <i>¿por qué?</i> Y el Padre no dijo nada, nunca
lo hizo. Debe de ser algo parecido a lo que responden muchos padres en Idomeni
si la desesperanza aún no les arrebató la voz o el valor para mirar a los ojos
de los hijos, lo que decimos o lo que balbuceamos muchos padres al ver la
mirada interrogante de nuestros hijos tras la barbarie televisada de un
atentado. <i>Ellos dicen Yihad, hijo, y
nosotros les decimos, a ellos, a los del chaleco de la muerte y el kalashnikov,
que sí, que Yihad</i>, y así firmamos el contrato del miedo que legitima su
causa y que nos victimiza y nos expide la licencia, ya saben, <i>Stairway to heaven</i>. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Y el miedo despierta el
odio. Lo hacemos tan rápido que espanta. Apagaremos el fuego con fuego, lo
intentaremos al menos. Apelaremos a la valentía, al heroísmo, a nuestro bien
sobre el mal de ellos, y entonces respiraremos más tranquilos, creyendo que ya
todo acabó como creímos otras veces; y le daremos gracias a Dios, que nos ha
rescatado una vez más de las garras de Dios, y cuando lo veamos,
majestuosamente -tristemente- clavado en su cruz por las calles estrechas del
siglo XXI suspiraremos por su sufrimiento, rodeados de semejantes que tal vez
lloran por el sacrificado tallado en nobles maderas, obviando, ignorando, que
la talla lleva la barbilla clavada en el pecho por la sangría y la fatiga. Pero
será nuestro miedo y la firma del contrato -el mismo miedo y contrato que
clavaron al hombre en la cruz-, que olvidaremos el nombre de Idomeni y las
almas encarnadas en su vientre putrefacto y hasta que la sangre fue derramada
en Bruselas e incluso la resurrección en un posible más allá, lo olvidaremos
todo, como olvidamos el sentido último de la fe, los pasos de quien caminó
sobre las aguas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Me dijo -la tele
apagada, el corazón pequeño pero incansable latiendo en la cuna; leíamos, cada
uno lo suyo, y era avanzada la noche-: tengo la sensación de que algo horrible
va a ocurrir. Y ahora sé que no importa ni mucho ni poco lo que pude decir yo,
lo que creía y de lo que un rato después ya no estaba tan seguro. No lo pensé
en ese momento y lo averiguo ahora, tan gris como la última pompa de humo del
vapor que Lord Jim abandonaba con la misma vergüenza y la misma culpa que ahora
me visten; y sin embargo, la miré, en silencio -nos llegaba como lo hacía desde
el primer día ese latido incansable del pequeño corazón sobre la cuna-, apenas
unos segundos, contemplando la belleza de su expresión de ojos asustados, la
boca entreabierta por la inercia de la voz en la última palabra puesta en la
misma punta de sus labios, y decía que la miraba, y el eco de sus palabras
permanecían en el salón con su carga de gravedad; no hablamos más y acordamos
que sí, que por supuesto ocurriría algo horrible, siempre es así; ya no se
puede esperar otra cosa que pasión y muerte, la resurrección sólo está
reservada para unos pocos.<o:p></o:p></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-38263548950531692322015-11-08T11:23:00.001-08:002015-11-08T11:26:07.184-08:00Fisherman at sea. La Mentira. La Locura<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i>
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i>
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Busco
una música para esto.<o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Un,
dos... probando.<o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Ah,
¡sí! ¡Ya!<o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">No.
Ahora: <o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Busquen
y pongan (bajito, que se trata de leer): Modern Art de The Rippingtons.<o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Ya lo pongo yo: </span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<iframe allowfullscreen="" class="YOUTUBE-iframe-video" data-thumbnail-src="https://i.ytimg.com/vi/s5ixjaNODc8/0.jpg" frameborder="0" height="266" src="https://www.youtube.com/embed/s5ixjaNODc8?feature=player_embedded" width="320"></iframe></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Daña la mentira. Lo
hace incluso cuando uno puede disfrutar -gratis, de momento- ante la fotografía
azul de este cielo de noviembre, de esta extraña primavera crepuscular. Pero no
es la mentira de andar por casa de lo que hablo; hablo de la Mentira. Otra
cosa, ya digo, que es dañina y que está fuertemente enraizada como lo hacen los
tumores que suelen ser mortales. Es así que no resulta difícil ver que la
mentira, la Mentira, lleva a la muerte; no a la muerte en la que la las
constantes vitales son iguales a cero, no, hablo de la Muerte, esto es, la
Mentira, la inexistencia por ausencia de realidad palpable y naturaleza real.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">El
mundo que ocupa mi existencia es a todas luces desordenado. Tengo cuanto he
querido tener, siempre lo vi al alcance de mi mano y tomé cuanto consideré
justo tomar, sería una estupidez diferenciar errores y aciertos si errores y
aciertos son los mismos caminos y distintas formas de interpretar el modo en que
se ha puesto un pie tras otro. No sé si justo es el término que más se ajusta a
lo que quería decir. Pero eso, aquello, estaba ahí, y yo lo quise o lo necesité
o creí que lo quise o lo necesité o ambas cosas, y lo tomé, y lo que es más
importante, no hacía daño a nadie, que aquí sí va bien lo de justo, un acto de
justicia, eso es, porque el origen de mi deseo siempre estuvo en ser, y no en
tener, tener es injusto, poseer sobre el ser es injusto. No tengo, soy. Decía
que tengo cuanto quise porque soy cuanto quise ser. Me es fácil, es mi
naturaleza. Hay algo sin embargo que se interpone, el camino es redibujar el
obstáculo y no otra cosa y no es una senda maloliente sembrada de cadáveres. No
culpo a los demás o a lo demás, ahora no puedo culpar porque es un verbo
inexacto, no sabemos cuándo empezó todo y qué es todo si ni siquiera sabemos si
hubo nada: Eduardo Flores de la Flor, nacido de hombre y de mujer, padre de
tres hijos, cada uno de ellos de una madre diferente -buenas y hermosas mujeres,
madres insuperables, y con las que compartió tiempo y espacio con libertad
hasta que se consideró que ya no había sentido seguir compartiendo-, duerme
junto a la mujer que ama y que lo ama, con sueños y vida, ahí está, sueños y
vida, ser, no tener, soy, hasta ahí puedo escribir: pregúntate de vez en cuando
si eres, si lo eres alguna vez, poco mal te hará. Es el día de hoy, el de
mañana no lo puedo conocer todavía, porque no siempre hubo algo o no lo
sabemos. El mundo que ocupa mi existencia es, a todas luces, el caos en el que
soy más feliz que muchos, por suerte y por lugar de nacimiento y por la piel
que me visto por las mañanas. <o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Últimamente camino
despistado y lo hago casi todo despistado. Sí, lo llevo haciendo como unos treinta
y cuatro años. Porque no cabe otra explicación que no sea la del despiste
permanente para no darse cuenta el resto del tiempo y sentirse sorprendido
cuando la mentira te asalta, como si no fuera realmente la mentira ese tumor
del que hablábamos y que, así como mi despiste me mantiene respirando, es la
mentira la argamasa de toda esta construcción: el mundo; dicen que gira sobre
su propio eje, cada veinticuatro horas; tal vez la primera mentira, quién sabe.
El movimiento de traslación me produce pavor.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;">Será tal vez por eso
que mi despiste desaparece en el éter de </span><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;">lo </span><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;">ficticio. </span><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><i>No </i></span><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><i>encuentro una libreta en la que una vez escribí un </i></span><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><i>relato que ahora,
no sé si porque no lo encuentro, me parece un relato cojonudo, un buen relato
para pasarlo a ordenador, </i></span><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><i>El día del hombre, se titula, y va de un tipo normal,
muy normal, un tipo como cualquiera que trabaja en una gestoría, un padre de
familia, normal, que toma la decisión de...</i> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; font-size: large; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; font-size: large; line-height: 115%;">En la ficción no existe la
mentira con m mayúscula, no en la buena ficción. Hay en ella una verdad no
absoluta, una verdad en movimiento y agradable al paladar, una verdad que nunca
se nos ocurriría escribir con v mayúscula. Y como todo no va a ser podredumbre,
la verdad de la ficción, sí, la verdad sin asideros -escurridiza como una
anchoa en el centro del océano-, la verdad en la ficción, mantiene en
imperfecto funcionamiento el factor humano que la mentira trata de convertir en
recurso o pieza recambiable.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">La
intención era moverse en algún momento a lo cotidiano, a la impregnación de la mentira.
Ahora me pregunto para qué, si no sería contribuir -un fiero verraco con
dientes de comadreja devora mi hígado- mintiendo sin pretenderlo. Veo que es
complicado, absurdo: medios de prensa escrita (no lo hagas), empresas de
mercenarios y cobardes al servicio (don´t do it) de la causa del flus y la
liquidez, hijos naturales (ne le fais pais) de la mentira; literatura de
consumo (pa fê l´) e industria de la ignorancia, escritores y poetas, baratos
(dit nie doen nie) y vanidosos se entregan al aquelarre y a la prostitución;
músicos de playback y cocaína y... Mentira... televisión para zombies y novela (ne
fari gin) negra para psicópatas, informativos (tun sie es nicht), permíteme que
insista: Mentira: todos tenemos un precio, el mío es...Valhe.</span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Cuando uno tiene
noticias de la mentira e inmediatamente piensa en el daño irreparable de su
consecuencia se encienden todas las alarmas. ¿Cómo no me he dado cuenta en todo
este tiempo? Sin embargo la mentira estaba ahí, mucho antes de haber abierto
los ojos por primera vez. De hecho fue la mentira quien te dio la bienvenida,
agradecida quizá por la nueva presencia que la hará más grande y fuerte, un
retal más para el mimetizado que lo acerca a una verdad posible.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Creer reconocer esa
extraña verdad en lo ficticio te lleva a la locura, a ser un loco. Como todos
ustedes saben, el loco es, en la mayoría de casos o en el clímax mismo de su
propia locura, desordenado. No cumple los requisitos del orden y el orden,
también lo sabemos todos, es la regla indicadora de lo correcto y lo bien
hecho, así lo dicen las tablas de la ley del supuesto sentido común. La locura
es el mal camino, te pueden encerrar por ello si llegado el caso tu caos afecta
al perfecto funcionamiento del orden. Si
tu caos no parece infeccioso, que siempre lo es, no tendrás mayor problema:
nadie te escuchará, u olvidará tus palabras una vez pronunciadas y en el aire.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i style="font-size: x-large;"><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><br /></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i style="font-size: x-large;"><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;">Hemos
dicho mentira y verdad y ficción y locura y orden y caos y palabras.</span></i><span style="font-family: "times new roman" , serif; font-size: large; line-height: 115%;">
<i>Ocurre que cuando sueño con leones, con
leones que me persiguen, huyo sabiendo que en todo ese asunto de la persecución
está en juego mucho más que la vida, sé que ellos tienen un motivo para hacer
lo que hacen, un motivo justificado que no puedo llegar a entender, y también
sé que yo, que vivo mi propio sueño y que a la vez puedo verme en él, me siento
ridículo, en la huída, como si el peso mismo de la razón que justifica la
cacería me hiciera profundamente ignorante, y lo veo claro, debería dejarme, mi
cuerpo dado a las fieras como alimento o como ellas quieran que sea mi carne ya
inservible más que para ellas, huyo sin embargo, con ese sabor a angustia
sanguinolenta en la boca, huyo por cobardía aunque de forma muy ineficaz,
porque sé, el sueño es recurrente, cómo ha de acabar todo, la locura, esta que
dibujo con palabras, los leones, que parecen tener su verdad, tan impresionante
verdad, sus razones para devorarme y mi sinrazón de huir sin saber por qué
porque en el fondo de toda la cuestión la huida se antoja mentira, es un sueño,
al fin y al cabo, y huyo, digo, decía, inercialmente hasta el fin conocido, una
canción que se repite, leones que no pueden ser leones galopan tras de mí, su
presa.</i></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Las palabras son las
partículas subatómicas de la mentira y la verdad. Para el loco la mentira cobra
forma definida en el orden y le es del todo imposible relacionarse
pacíficamente con el entorno y la sociedad, la búsqueda no tiene fin y es, la
búsqueda, un fin mismo. Para el loco la única verdad posible es el caos, aunque
también lo es para el Universo <i>entropía</i>,
que es infinito y lo infinito <i>el momento
del pensamiento que me gustaría alcanzar aunque solo fuera por unos segundos,
el infinito, sí, divago y divago y divago y lo haría hasta originar una
conexión sináptica con la savia de los árboles y el viento de los bosques en
los que hay viento y con la rabia desatada en las entrañas de los megavolcanes que
de entrar en erupción nos borrarían del planisferio, como el Cumbre Vieja en
las Canarias o el de Yellowstone en los USATIERRADELASLIBERTADES, que es donde
vivían tranquilamente y mangando emparedados el oso Yogui y Bubu, cuando en
realidad es el infierno en la Tierra, en fin, el infinito, ese momento o lugar
inabarcable</i>, el campo en el que la locura no permite la expresión
"sentido común" porque huele a mentira. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Daña la mentira, la
sociedad que formamos como individuos, el lugar en el que desde siempre y mal
viven los cuerdos propietarios del sentido común. Lo hace aunque solo sean los
locos quienes sienten la gélida puñalada, el dolor. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Aquí
un dibujito en el que la mentira es representada por un político o un banquero
o Donald Trump. La mentira lleva en su mano un ukri, un cuchillo tradicional
nepalí, ¿lo ven? Busquen en Google un momento, les doy unos segundos. <o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">¿Ya?
Eso es. <o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">(Sé
que no han buscado un carajo, da igual, para que lo sepan: es un cuchillo curvo como
un boomerang y de punta fina, que es lo que jode).<o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">[Dibujo: Se lo imaginan: La
mentira me apuñala justo por debajo del esternón.]<o:p></o:p></span></span></i></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Qué
quieren que les diga: Fisherman at sea:</span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjLgtU0Olf2irEzz4awAHTfUWMO4K3Vg4cjmeT7pts35L8d_V7bhr3Ge-KdZu0GPyMWP0Az7RewpSuJM2CAjmchaOGLBGeffVjCbwnO5JXt4FskwZTOUJSXOwFvpcKUsD3SF6K6-QV5FHpx/s1600/fishermen-at-sea.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="481" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjLgtU0Olf2irEzz4awAHTfUWMO4K3Vg4cjmeT7pts35L8d_V7bhr3Ge-KdZu0GPyMWP0Az7RewpSuJM2CAjmchaOGLBGeffVjCbwnO5JXt4FskwZTOUJSXOwFvpcKUsD3SF6K6-QV5FHpx/s640/fishermen-at-sea.jpg" width="640" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<i><span style="font-family: "times new roman" , serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></i></div>
Autor: <a href="http://www.artehistoria.com/v2/personajes/3492.htm">Joseph M. William Turner </a><br />
Fecha: 1796<br />
Museo: <a href="http://www.artehistoria.com/v2/museos/32.htm">Tate Gallery (Londres)</a><br />
Características: 91,5 x 122,4 cm.<br />
Estilo: <a href="http://www.artehistoria.com/v2/estilos/15.htm">Romanticismo Inglés</a><br />
Material: <a href="http://www.artehistoria.com/v2/materiales/1.htm">Oleo sobre lienzo</a><br />
Copyright: (C) ARTEHISTORIA <br />
<div>
<br /></div>
<div>
<span style="background-color: white; color: #333333; font-family: "verdana" , "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: 12.8px; line-height: 15.36px; text-align: justify;">Este lienzo que contemplamos fue el primero que Turner expuso en la Royal Academy. Se trata de una marina nocturna en la que el maestro muestra su interés por presentar diferentes tipos de iluminaciones, al sentirse atraido por ejercitarse en la técnica del claroscuro. El maestro londinense divide la composición en un primer plano ocupado por las fuertes olas, un plano intermedio donde observamos la barca de pesca zarandeada por el oleaje y un trasfondo en el que encontramos los árboles de la costa. Entre las nubes se aprecia el círculo blanquecino de la luna, cuyas luces bañan la escena para crear sensacionales contrastes lumínicos. La influencia de la pintura holandesa del </span><a href="http://www.artehistoria.com/v2/estilos/8.htm" style="background: rgb(255, 255, 255); border: 0px; color: #9b3004; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 12.8px; line-height: 15.36px; margin: 0px; outline: 0px; padding: 0px; text-align: justify; text-decoration: none; vertical-align: baseline;">Barroco</a><span style="background-color: white; color: #333333; font-family: "verdana" , "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: 12.8px; line-height: 15.36px; text-align: justify;">-</span><a href="http://www.artehistoria.com/v2/personajes/3618.htm" style="background: rgb(255, 255, 255); border: 0px; color: #9b3004; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 12.8px; line-height: 15.36px; margin: 0px; outline: 0px; padding: 0px; text-align: justify; text-decoration: none; vertical-align: baseline;">Ruysdael</a><span style="background-color: white; color: #333333; font-family: "verdana" , "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: 12.8px; line-height: 15.36px; text-align: justify;">, </span><a href="http://www.artehistoria.com/v2/personajes/2227.htm" style="background: rgb(255, 255, 255); border: 0px; color: #9b3004; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 12.8px; line-height: 15.36px; margin: 0px; outline: 0px; padding: 0px; text-align: justify; text-decoration: none; vertical-align: baseline;">Hobbema</a><span style="background-color: white; color: #333333; font-family: "verdana" , "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: 12.8px; line-height: 15.36px; text-align: justify;"> o </span><a href="http://www.artehistoria.com/v2/personajes/3579.htm" style="background: rgb(255, 255, 255); border: 0px; color: #9b3004; font-family: Verdana, Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 12.8px; line-height: 15.36px; margin: 0px; outline: 0px; padding: 0px; text-align: justify; text-decoration: none; vertical-align: baseline;">Van Goyen</a><span style="background-color: white; color: #333333; font-family: "verdana" , "arial" , "helvetica" , sans-serif; font-size: 12.8px; line-height: 15.36px; text-align: justify;">- se manifiesta tanto en la temática como en el importante papel otorgado al cielo, ocupando más de la mitad de la superficie del lienzo. El movimiento, la iluminación fantasmagórica y la violencia de la naturaleza serán elementos comunes a buena parte de los primeros trabajos de Turner. </span><span style="color: #333333; font-family: "verdana" , "arial" , "helvetica" , sans-serif;"><span style="font-size: 12.8px; line-height: 15.36px;"><a href="http://www.artehistoria.com/v2/obras/14054.htm">http://www.artehistoria.com/v2/obras/14054.htm</a></span></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-2633946441416927362015-10-12T14:20:00.000-07:002015-10-12T14:20:37.059-07:00Por cada granito de orgullo uno de vergüenza.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">A uno y otro lado del
meridiano de la verdad o del sentido común, del tino o la lucidez, se
manifiestan, también, unos y otros extremados como dolidos y como huérfanos de
una madre, que, según el dibujo o la queja, viene a ser puta de labios pintados
o sin pintar. Así ocurre hoy, día de la Hispanidad, que es día para algo, y que
tampoco sabemos muy bien qué es, y que muchos hacen que sea día de patriotismo
barato y día de absurdo antiespañolismo. Como buen día para algo es
oportunidad. Últimamente oportunidad significa meterle el dedo en el ojo a
alguien. A ambos lados del meridiano o de un camino mejor se grita y crujen los
dientes. ¿Por un ideal? ¿Por una idea? ¿Por dinero y poder? ¿Por un cercado?
¿Por qué?<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">No me cansaré de decir
que España es como un dolor de huevos. Lo es, y todos conocemos las razones de
tal afección. Tal vez hoy no sea el mejor momento para decirlo. Porque en cada
lado del meridiano no faltan los que aprovechan la voz, anónima o no, para izar
su propio ideario delirante, para colar su granito de odio. Siendo objetivos podríamos decir que España
no está en cuestión. España es un país, como cualquier otro; se puede entender
que si Burkina Faso es un país, España también lo es, así como Francia o
Mozambique. Negarlo es ponerse a la ridícula altura e inopinada verborragia de Willy Toledo.
Pero hoy día de la Hispanidad celebramos algo más que la existencia y la
contingencia de ese país que es España, celebramos los días que a toro pasado
creemos saber que fueron mejores, días de gloria, y en esos días incluimos a
todos aquellos países que tuvieron que ver con nosotros de la manera que sea.
Ni celebramos un genocidio ni celebramos esa borrachera de gloria que algunos
atribuyen a sus antepasados, nada de eso, es mucho más simple.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">En los últimos años el
debate se ha desarrollado cada vez con más encono y agresividad. El debate
sobre la cuestión española. A algunos se le retuercen las tripas solo oír
hablar del desfile de las Fuerzas Armadas. Otros saltarían como espontáneos
exaltados a besar la bandera. Unos y otros harían bien en hacérselo mirar. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Uno hoy no puede
sentirse orgulloso de casi nada de lo que pasa en España que no sea, por decir,
lo que ocurrió ayer en Vejer de la Frontera y su lomo en manteca. Cosas así. La
España digna de defender es la de una cultura de siglos y la Historia de los
muchos que, naciendo en España, hicieron del mundo un lugar mejor. La España
digna de defender es la de los que tiran del carro y procuran vivir de la mejor
manera posible pasándolo lo mejor que pueden y riendo siempre que se da la
ocasión. La verdadera seña de identidad del pueblo diverso que es hoy España es
la solidaridad y el generalizado buen humor de sus gentes, la impresionante y
variada gastronomía, una lengua universal con la que se escribieron obras
universales, artistas que dejaron en sus obras un pedacito del lugar que
nacieron para donarlo al mundo como muestra de lo mejor de su herencia como
españoles; la verdadera España, digna de defensa, es aquella que el españolito
y el no españolito, el inmigrante, el turista, el refugiado, puede amar por lo que
la tierra le puede dar de vida, y no de muerte; uno es de donde pace... y en
España, todo hay que decirlo, se pace bien.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Luego están las
extremas izquierdas y derechas, también los borregos de unos y otros que sumados
son legión, lo que viene siendo el dolor de huevos. Izquierdas y derechas
pelean como en Duelo a garrotazos de Goya por el trozo de pastel que para ellos
representa España y que no tiene absolutamente nada que ver con aquello del
pueblo solidario que España es y el buen humor de las gentes españolas y el
largo etcétera. Las columnas de opinión de los periódicos son en la mayoría de
casos como agrios vómitos cayendo por una pared que debía ser blanca, vómitos
rojos o azules, da igual; si uno no supiera que para estar ahí todos maman de
teta de vaca gorda -cada uno la suya- se asustaría al ser testigo y víctima de
tanto odio. No son las ideas, son los ideales, sus hijos bastardos y no poco
putañeros. Tuits o estados de Facebook duelen a los ojos de quien presume de
cierta racionalidad o sentido común, escupitajos verbales en la cruzada
personal de quienes creen que un trapo es sagrado o de los que creen que el
trapo no es sagrado porque no le gustan sus colores. Y la verdad es, que trapo,
lo que viene siendo sagrado, nunca es, independientemente de su color; porque
trapo, por mucho que trapo quiera significar, trapo es al fin y al cabo, nunca
se vio trapo dando de comer a nadie ni aliviando sufrimiento, nunca el símbolo
ejerció de otra cosa que no fuera símbolo, un recurso, un anillo para
gobernarlos a todos. Digo yo que la vida es incuestionablemente más importante
que todo símbolo. Y no, ni de coña es aquello de qué puedes hacer tú por tu
país, porque tu país, tuyo, no es. A él llegaste por casualidad. Y no, es tu
país, articulado por eso que hemos dado en llamar democracia, lo que debe hacer
por cuantos vivan bajo su techo y que hacen posible que el país, España, siga
siendo país, números sin los que a todo país les sobra el nombre y toda la
parafernalia simbológica y estructural.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Se celebra en mi casa
esta españolidad a medias. Lo que para Mariano Rajoy significaría ser poco
españoles. Que digo yo, que uno no puede ser ni mucho ni poco español, en fin,
triste figura, él como Willy Toledo. Necios. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Si bien es cierto que
no son pocas las virtudes de esta tierra y sus gentes también lo es que
cargamos con nuestra propia maldición de no saber dirigirnos como el país que
somos. Nos envanecemos tras la victoria del español para no perdonar jamás su
probable -inevitable en algún momento- flaqueza, despreciamos el talento -el
verdadero talento-, votamos a la mafia de rancio abolengo por insana costumbre,
nos asustamos con el progreso, preferimos la superchería al conocimiento,...
También son rasgos de nuestra seña de identidad. Así que a medias, ya digo,
celebramos en casa nuestra españolidad: por cada poquito de orgullo un poquito
de vergüenza. Lo que nos queda para una celebración completa lo dedicamos a la
autocrítica. De esta autocrítica se entiende el celebrar todo esto hasta su
justa mitad. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Mientras unos y otros,
a ambos lados del meridiano, gritan, existen otros que se fueron con poca
esperanza de volver. Ni unos ni otros saben, los extremados digo, qué significa
celebrar el día de la Hispanidad lejos de casa porque en casa no queda o no
dejan donde pacer. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Quienes por su país no
han hecho más que llenar la barriga y las cuentas en bancos extranjeros se dan
golpecitos de pecho al ver a los valerosos soldaditos pasar en estricto orden
cerrado. Es como si dijeran: "míralos, allá van, tan serios ellos y tan marciales, ellos, los que
van a morir por nuestros business allende las fronteras". Quienes aspiran al
título de salvadores de una patria insalvable, otrora clavo ardiendo o
esperanza u oportunidad, señalan con ignorancia -con muy poco sentido del contexto
histórico, con torpeza- como genocidio el descubrimiento de América: hechos
acaecidos en un momento en el que en el mundo un crucifijo y una corona eran la
ley y el orden. Ya no es así, afortunadamente: las coronas son de bisutería y
los crucifijos solo acojonan a Drácula. Me resulta un insulto el desarrollo de
una explicación.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Celebrar como se
celebra esta festividad, enalteciendo los mismos valores de otro tiempo de
infausto recuerdo, aviva el fuego del rencor, y el rencor azuza al odio. El
español quisiera sentirse orgulloso de algo que no sea la cabra de la legión y
la pose de unos políticos que le han decepcionado. Más que un día para agitar
trapos los españoles quisieran celebrar su españolidad con el orgullo de quien
quiere compartir el sentimiento, y no con el orgullo del niño que arrebata un
juguete a otro niño. Han conseguido que el trapo no represente a nada ni a
nadie que no sean los herederos de aquel bando vencedor. Se ha de hacer memoria
histórica, pero una memoria histórica para el orgullo, rememorar cuanto puede
hacernos sentir orgullosos; que en España no es poca cosa. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">España es un país
grande, y es un país libre, pero grande y libre de verdad, lo es gracias a cada
currante, gracias a todos aquellos que en representación del conjunto luchan
por una victoria en cualquiera que sea la empresa, siempre y cuando sea la
empresa motivo de orgullo y no de vergüenza. Hemos llegado al siglo XXI de
milagro, por los pelos, sacudiéndonos tal vez el polvo de los viejos escombros
de la chaqueta. Pero hemos llegado. La españolidad no se demuestra dando un
beso de tornillo a una bandera, ni siquiera yendo a ver a nuestros militares
desfilar ante quienes manejan los hilos del país; militares que por otro lado
merecen un respeto, políticos que, por otro lado, merecen una total
desconfianza. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">El español quisiera
sentirse orgulloso de su pasado con la solvencia que otorga el haber superado
la tragedia o la infamia. El español quisiera sentirse orgulloso de su
presente, mil veces machacado por quienes llevan las riendas o quienes las
pretenden. El español quisiera sentirse orgulloso del trabajo colectivo
realizado por el bien de sus hijos, los españoles del futuro. A día de hoy, día
de la Hispanidad, nada de esto es posible. Por cada granito de orgullo otro de
vergüenza. </span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-38437718216792670632015-09-09T01:37:00.000-07:002015-09-09T01:37:03.706-07:00La triste alegoría<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Después de todo corren
por no llorar. O no. No lo sabemos si no miramos. Para mirar están las cámaras,
y para ello, quienes las manejan. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Una masa informe de
personas desesperadas corren a vanguardia, hacia algún lugar que desconocen y
que es una promesa. Por retaguardia, la destrucción, Baal Moloch y sus fauces,
ISIS y drones, un régimen tenebroso, la noche de sirenas, los impactos y sus
cráteres. Así que corren, por no llorar. Caminito de.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Ella viste vaqueros,
camisa azul cielo, no sé si tela vaquera también. Lleva una cámara y los graba.
En realidad lo que le gustaría grabar sería un barracón lleno de cadáveres,
cualquier tiempo pasado siempre fue mejor. Pero está ahí, y los ve correr. Y su
rabia es tan grande, la de ella, su frustración, pantalón vaqueros, la
impotencia por verlos a ellos, correr, invadir, como si del mismísimo ejército
otomano se tratase, en otro tiempo, su mezquindad... vileza más allá de lo que
somos capaces de asumir, aunque lo veamos.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Ellos corren y ella,
cuando puede, lanza una pierna, poco importa si niños o adultos, ella golpea
con saña, no suelta la cámara, provoca. Muchos corren y alguien los golpea
desde su sombra. Al fin y al cabo, la vida misma: muchos corren y unos pocos
golpean.</span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-32794009193302523592015-09-07T03:29:00.000-07:002015-09-07T03:29:25.871-07:00Cádiz no crece gracias al puerto<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Abre la edición digital
del Diario de Cádiz con el titular "Cádiz crece gracias al puerto".
La cosa tiene su gracia, no crean, un titular digno de una matrícula de honor
para un estudiante de publicidad. Cádiz. Crece. Gracias. Puerto. Siempre
positivo, nunca negativo, como Van Gaal, pero lo contrario. A bote pronto, así,
sin leer más, sin saber más, uno que pasa y lee, qué va a pensar, sí, pues eso,
que oh Cádiz, esa ciudad que funciona.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pero no es esa la
verdad. Para entender bien ese titular debemos remontarnos a antes de la
crisis, debemos saber lo que la insidia de unas instituciones han elaborado con
mimo insultante, aprovechando la ocasión, como buenos políticos, esto es, la
miseria y la desgracia de los ciudadanos, oportunidades, decía; cómo, poco a
poco, han ido cargándose un puerto que puso a la ciudad en el mapa mucho antes
de que existieran los mapas, siglos ha. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Se parten el pecho
estos políticos cuando hablan de crear empleo. No dar trabajo, no, sino crear
empleo, que lo uno no es lo otro y lo otro no es lo uno según impone la
neolengua y el discurso y lo cerca o lejos que estemos de unas elecciones o los
datos del desempleo. Aclara después la noticia que el crecimiento es meramente una
cuestión de dimensiones, donde antes había un par de metros ahora habrá
cincuenta, y después de decir esto, todas las falsas posibilidades que va a
suponer tal crecimiento. En este empeño de convertir la ciudad de Cádiz en un
bonito expositor, una exótica antesala de la capital andaluza para cruceristas,
la APBC (Autoridad Portuaria Bahía de Cádiz), la Junta y la cretina de pelo
rubio se cargaron no poco empleo en el puerto de Cádiz, el equipo de gobierno
actual anda cazando moscas al respecto. Asfixiaron los ya escasos tráficos que
frecuentaban los muelles ahora arrebatados y que generaban auténtica riqueza en
forma de puestos de trabajo directos a portuarios, e indirectos, a las empresas
consignatarias y sus empleados en favor de un "Plan Estratégico" al
que no se le sospecha estrategia alguna, si no es la de dar más espacio a los
tráficos limpios, esto es, las tasas que se le cobran a los cruceristas una vez
han dejado sus naves, tráficos limpios, atraques y aquellos cuyos ingresos
pasan a manos de las instituciones sin pasar por uno solo gaditano. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Mientras tanto se le
marea la perdiz a una plantilla cada vez más mermada de portuarios que cada día
temen un poco más por la pérdida de sus puestos de trabajo. Se ha descuidado el
puerto de Cádiz en una larga pero exitosa maniobra de abandono sistemático, se
ha quedado antiguo. Ahora, a José Luis Blanco (PSOE), presidente de la APBC,
que lo más parecido que ha visto a un barco en su vida ha sido un pelícano, de
actividad portuaria ya ni hablamos, Blanco, en avanzado estado de descomposición
política el hombre, que ya se sabe cómo se llega a ocupar tal puesto en Cádiz, se
le llena la boca con una desgracia generalizada hecha oportunidad y baza, quién
sabe, para futuras bazas y oportunidades de partido. Y claro, Diario de Cádiz
nos la intenta colar, qué pillines. Nos venden puestos de trabajos donde no se
ven más que puestos para vender postales y guías, de Sevilla, claro, de
Sevilla, que es adonde responden que van los cruceristas siempre que son
preguntados por los incómodos portuarios, ya con sal y mosqueo de siglos
pegados a las escamas.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">¿Cómo, pues, se le vende
una moto a un portuario? Fácil: la nueva terminal de contenedores. Toda vez que
el tráfico rodado a partir de buques Ro-Ro ha sido aniquilado por el alto coste
del atraque y la cada vez menos capacidad de maniobra para vehículos, tráfico
de Marruecos (dos veces por semana: trabajo) incluyendo el alquiler de la rampa
móvil que posibilita la descarga -por el camino moría la empresa consignataria
TPC- la idea fue apretarle los tornillos a las grúas portacontenedores de
Concasa (tres tráficos por semana: trabajo) dificultando la concesión de terrenos para el
manejo con maquinaria de contenedores. En Concasa ya desmontan para poner
caminito a Huelva, puerto en auge gracias no solo a la buena gestión de las
instituciones, también a la buena voluntad, en este caso, para crear verdadero
empleo, que es de lo que trata todo esto. Pasa que los barcos para Navantia no
nos deja ver el bosque, pero que bosque, como las meigas, haberlos haylos, y el
bosque es un puerto comercial en desenfrenada decadencia, una ciudad realmente
jodida, hablemos claro, el puerto que históricamente fue motor de una ciudad,
que unos creen ver bonita y otros la vemos desangrada. En esto el artículo de
Diario de Cádiz no se coge los dedos y cita textualmente las palabras de
Blanco: "Cádiz es una ciudad administrativa, turística y
comercial..." En ese orden, con esa poquita vergüenza. Y resulta que es el
orden de esas prioridades lo que lleva mal en Cádiz desde hace un tiempito.
Porque no, porque Cádiz ni es Malta ni es Dubrovnik; una bonita ciudad, que lo
es, pero no es Venecia, y por supuesto, no es Sevilla, capital andaluza, pero
sobre todo, capital de Susana, cuyo puerto, curiosamente, sí tiene actividad
comercial, aunque los barcos deban pasar una auténtica odisea al remontar el
Guadalquivir. En Sevilla, como en Huelva, se nos gana en voluntad, que no en tradición
portuaria, que en eso, insisto, Cádiz tiene escuela desde lo del huevo de Colón.
<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Decía la nueva
terminal. A día de hoy la nueva terminal es una moto sin marca ni casco. Bien
avanzadas sus obras, los portuarios no consiguen explicarse las razones por las
cuales no reciben noticias de las empresas interesadas en su explotación, una
explotación que como mínimo podría ampliar la plantilla de portuarios en 150
trabajadores, sin contar el personal necesario para el funcionamiento de la
empresa consignataria. El artículo de
Diario de Cádiz nos cuenta que el concurso tendrá lugar en 2016 y la mencionada
explotación, humo de momento, para primer trimestre de 2017. Y claro, concurso,
ya sabemos lo que pasa con los concursos, que nos tiemblan las canillas, no
digo nada lo portuarios, acostumbrados a que se las den con y sin queso. Las
obras para la nueva terminal de contenedores, decía, se encuentran en fase
avanzada. Pero la APBC necesita como el comer, el cobrar, un dinero que Europa
no piensa soltar hasta que el inexistente puerto de carga y descarga no
demuestre que su explotación es rentable, no vaya a pasar como los famosos
aeropuertos en los que ni despegan ni aterrizan aviones, que no son en Europa
sencillos currantes como los portuarios, que ya sabemos cómo las gastan, sobre
todo después de haberles vendido gato por liebre más de un millón de veces en
materia de subvenciones. Pero sin pasta, ni se pone fin a la obra y,
finalmente, tampoco veremos grandes empresas del movimiento de contenedores
pujar por el <i>business</i>, que insisto,
interesan tanto como los barcos que prometen construirse y repararse en
Navantia. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Mientras tanto, eso sí,
tenemos nuestro fantástico Plan Estratégico, vete tú a saber para qué. "Será
un sitio muy versátil" dice José Luis Blanco, también dice algo de lo
chulos que quedan los conciertos allí, que es como decir que, bueno, en
realidad no tenemos ni puñetera idea de qué vamos a hacer (un parking, qué si
no, por ejemplo), pero que mangar, mangaremos, que de eso nosotros sabemos
tela. Nada de lo que dice el artículo del periódico gaditano huele a creación
de puestos de trabajo, nada en absoluto, o, en cualquier caso, precarios
puestos de camareros/gondoleros, empleos que suben y bajan como los mareas,
según temporadas. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Si una ciudad como
Cádiz vive de espaldas al mar, muere, como lo harían las gaviotas, de irse a
vivir a la Mancha. Y no, Cádiz NO crece, ni gracias al puerto ni a nada, hacen
más anchas sus aceras, nada más.</span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-89907103593359841642015-09-06T02:06:00.001-07:002015-09-06T02:06:46.508-07:00Sangre por las venas<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Se me abre de nuevo el
debate. Siempre lo hacen otros, no yo, que lo considero innecesario: vamos a
ver, ¿tú eres de derechas o de izquierdas? Para empezar servidor es ingenuo,
sobre todas las cosas; de segundo, un tipo desmedidamente apasionado. Esto
último trae no pocos disgustos, hasta que la edad lo haya pulido, no demasiado,
espero, frustraciones propias del poeta romántico. Pero ingenuo, decía de mí, e
insisto, ni de derechas ni de izquierdas, más bien un peatón humanista. Que no
es lo mismo que decir de izquierdas, que la izquierda tampoco ha demostrado
serlo una vez alcanzada la falsa victoria. Tampoco soy de Podemos, no me
considero un podemita: en el mercado están las peras, las manzanas y las
naranjas; y las peras están pochas, las manzanas llenas de bichos y las
naranjas, aunque caras, tienen buena pinta; ¿qué voy a comer de postre? Claro
que decir, mi pensamiento es de corte humanista, suena pretencioso, cuando no
debería. Y suena pelín cursi decir que se es un ser humano que no solo se
preocupa de sí mismo, sino que también se preocupa por otros semejantes y, en
esa línea, en el pasado, presente y futuro de la especie pensante de entre
todas las que habitan este globito verde y azul, al que, de seguir así, le
queda no más de un cuarto de hora. Quien no haya visto el mal, quien no ha sido
capaz de reconocerlo en sus propias palabras y acciones, tiene poco material
para ver la realidad del mundo en toda su complejidad, de intuirla siquiera. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">La complejidad de ese
mundo y la ceguera generalizada son la causa de que al ser publicada la
fotografiada del niño sirio durmiendo el sueño de los justos en una orilla
turca muchos traten de hacer política con un problema que ante todo se ha de
solucionar siendo humanos, ni de derechas ni de izquierdas, ni europeos ni alemanes
ni españoles, humanos. Ahora en estos tiempos, veloces como un Cadillac sin
frenos, que dijo Sabina, nuestra humanidad parece perdida, del todo y sin
remedio. El columnista Enrique García-Máiquez trata de colarnos en su espacio "Su
propio afán", tan propio, en el Diario de Cádiz, los supuestos factores
económicos y culturales que no estamos valorando por un prurito de
sentimentalismo en el asunto de la acogida de refugiados; lo hace bien, tiene
oficio en esto. Su buen uso de la pluma es un desperdicio cuando lo que se
escribe roza lo mezquino, cuando no una carencia total de empatía, una
lamentable ausencia de humanidad, muy poquita vergüenza. Es uno entre muchos.
Tampoco tiene sentido difundir la noticia que circula por ahí queriendo vender
que los hambrientos que escapan de la guerra rechazan comida por llevar estos
paquetes la conocida cruz roja por ir en contra de su religión. Hay quienes han
abierto en Facebook una página llamada "Aforo completo", nada que
comentar al respecto. Va a resultar válido aquel versito que escribí hace un
tiempo que dice "que no es cierto, que haya más poetas que
genocidas". Lo cultural y lo económico importan bien poco cuando vemos que
las aguas nos devuelven ahogados los niños de aquellos que huyen del Mal, de la
guerra. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Los señores de la UE
han prometido tratar el asunto de los refugiados el día 14 de este mes. Si
saben que van tarde en esto y además no se reúnen de urgencia, lo que sí es una
certeza, es que se la suda muy por lo bajo lo de los niños ahogados, lo de sus
padres y lo que ocurre en Siria, tan veloces que fueron con Libia, tanto como lo
fueron en Irak. Allá van los soldaditos, de ayuda humanitaria. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Había quien denunciaba
la imagen del pequeño Aylan -o que abrían debates paralelos sobre ética periodística,
mareando la perdiz más que nada, dando a valer su opinión por ser su opinión
tan merecedora de reconocimiento, la mía es más larga y gruesa than your- por
lo desagradable de la misma, que era poco útil su difusión, que como esa habían
visto muchas y que no servía para cambiar nada. Muy poco tenemos realmente los
peatones para cambiar las cosas, un mínimo margen de movimiento y apenas unas
pocas herramientas. Entre esas herramientas están las redes sociales, que no
todo va a ser ordinariez y autobombo e hipocresía. A partir de la respuesta
general e indignación mostrada en las redes, la presión ejercida como uno más
de esos pocos fenómenos espontáneos y justos que ayudan a la reconciliación con
el ser humano, el discurso de los mandamases europeos cambió y las cifras de
personas a refugiar también, se empezaron a manejar más del doble de lo que se
había tratado en un principio. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Me preguntaban al
respecto de mis inclinaciones políticas: ¿qué prefieres, el orden o la
justicia? Estaba claro que si respondía una cosa era de derechas, si la otra,
de izquierdas. Me niego a responder, obviamente, para no seguir un juego
pueril. Esperé un poco antes de decir que el debate entre izquierdas y derechas
me parecía antiguo, poco eficaz, me apoyo en lo que sabemos del siglo XX. Fue
entonces que el problema era que yo pertenecía a otra generación, una más
reciente, como si no habitase uno el mismo mundo que ellos, como si mi realidad
fuera otra distinta. Podría haber dicho algo de lo vivido hasta este preciso
momento, lo que he visto en otras partes del mundo -un mundo dentro de este
mundo-, lo que una vez provocó en mí el pensamiento en el que la política tiene
un peso menor que otras cuestiones. Pero no lo dije. Ver y vivir cambiaron una
forma de pensar, de entender, ir un poco más allá en los problemas que aquejan
a la humanidad de estos tiempos, de este Cadillac desbocado. Es por eso que
creo que la fotografía del pequeño Aylan es necesaria, también otros tendrían ahora
la oportunidad de ver y de vivir, si aún les corre sangre por las venas, y se
olvidarían por una vez en su insignificante existencia que son de derechas o de
izquierdas; sobre todas las cosas, son humanos. </span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-36700846395765997752015-09-02T13:59:00.000-07:002015-09-02T13:59:25.159-07:00Si te dicen que me ahogué<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgFZ8yyPPaQedq8oQ_1unfPpryESxUErR8j7u0pRIof1Pz3gZyCnxAdvSVRozdW7lBe21v5W-hbVMs2jmr_Nuei51fuVf2-RgIqKhTJhRXhpAEVnB22eHNJwE8s3sGSLRofr_-b61PyfxLT/s1600/turquia.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="424" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgFZ8yyPPaQedq8oQ_1unfPpryESxUErR8j7u0pRIof1Pz3gZyCnxAdvSVRozdW7lBe21v5W-hbVMs2jmr_Nuei51fuVf2-RgIqKhTJhRXhpAEVnB22eHNJwE8s3sGSLRofr_-b61PyfxLT/s640/turquia.jpg" width="640" /></a></div>
<br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Ya no sabe uno si esto
tiene que ver con el momento de la Historia que algún escriba redactará con
medio limón mordido y estrujándose en los dientes o si es como decía el
ilusionista un producto de nuestra más que fantasiosa y aterrada imaginación.
Los días se suceden llenando los ojos y los oídos de vorágine autodestructiva,
ese leviatán enseñando siempre la caballuna dentadura, la ferocidad de una
realidad monstruosa mezclada con el crudo hormigón de los días y los días que
se prometen ahora otoñales, días sangrantes y grisuras y días de los de a morir
cada día un poquito. La rueda sigue girando siempre en la víspera de lo
infinito, totum revolutum, tener sobre el ser, el miedo, siempre el miedo, el
miedo al diferente y al otro mundo que no es el nuestro y que es el de otros
que sufren y que nos hacen sufrir más por egoísmo que por pura empatía, la
empatía cada vez más algo artificioso, insufrible empatía, aleja de mí este
cáliz. Ya no sabe uno si es la madurez, qué cosas, madurar, si es la madurez lo
que te lleva a por el camino de la anestesia o por el camino de la compasión,
es tan puta la tristeza. Si te dicen que me ahogué: cuando una imagen vale más
que todas y cada una de las combinaciones de un abecedario. La muerte se abre
camino: se traga la mar criaturas fantasmales en éxodo doliente y luego las
esputa como se hace con la bilis de un capitalismo al que le sobran números de
a dos patas y le faltan siempre dos patas de cifras colosales, Moloch del siglo
veintiuno, este del posmodernismo y su deidad original fenecida, el siglo del
cinismo, dioses que sentaron la cátedra del terror ahora recogida la doctrina
del humano vivo y muerto. Así las cosas, que empiece el aquelarre, ya nos
ocuparemos de la hoguera, son na más que unos pocos brujos gurús de la
sinrazón. La razón no entiende de patrias ni fronteras. Yo nací aquí en un
lugar sin horizontes lleno de semejantes, de qué me hablas cuando me hablas de
aquí o de allá, nacimos, qué más quieres, no te parece excesivo, a qué pretender
la eterna sonrisa, refugiados en el meridiano de sangre. Soy del lugar mismo en
el que me han puesto mis pasos y antes los pasos de otros y antes que eso los
pasos de otros, tierra de caníbales siempre, de faraónicas calamidades y de
muertes inexplicables, soy entonces de cualquier sitio en el que algún día
enterrarme bajo una roca y sin más mortaja que lo que fui para quienes me
quisieron y me odiaron. Frenéticamente y enloquecidos, vivimos un ensayo sobre
la ceguera, un Macondo extrapolado, una tortura mecánicamente mediatizada por
los hijos del billete verde y la mierda blanca pa la nariz y las tarjetas
Black. Y en el Mediterráneo, muerto el perro, se acabó la rabia. Y la rabia
devorándonos por dentro, a los que nunca nos adaptamos y a los que nos negamos
a ver el mundo correcto de los correctos y políticamente sin escrúpulos que tal
vez nacieron de una loba y que hoy se alojan en casas blancas encaladas con el
amasijo de ceniza que sobró de las ruinas del segundo mundo, de lo que pudo
haber sido y nunca fue, como flagelos cabezones precipitados por un ojo de
retrete. Tristes guerras, si no es amor la empresa, tristes, desheredados hijos
de un dios menor, tristes, aquellos que viven el tener por encima del ser, más
tristes, quienes pasan una vez por el planeta sin haber reído o llorado por lo
que merecía ser sufrido o disfrutado. Pero el perro no muere, es lo que tienen
las guerras posmodernas, designadores láser en la proa del drone, califatos
homicidas, Babel entre llamas, Sodoma sodomizada, todos víctimas: verdugos de
los hijos de los hijos. Construyamos una nueva Babilonia en la que los hombres
estrangulen a sus mujeres y pongamos en todos los hogares un televisor de
plasma, para todos los públicos, que así las penas son menos. Llegará la
extinción como el eructo de un árabe, como alivio de ventosidades, muy
agradecido pues. Insisto, que dónde es esto en lo que estamos, qué extraña
pesadilla kafkiana de las comisiones bancarias, la de los eternos imputados sin
cárcel probable y los infantes corruptibles y las orillas sembradas de cadáveres,
dónde, cuándo llegamos y, sobre todo, cómo coño se sale, en qué momento se nos
anuncia la estación de servicio, para expulsar toxinas por vía urinaria, para
echar un piti, ahí al lado, lejos del mundanal ruido y este insufrible
sentimiento trágico de lo que es imposible vivir porque apenas queda aire para
respirar, lejos de ser like a rolling stone, knockin´on the heavens door.
Cierran librerías por exceso de viejas novedades,
mueren los escritores por superávit, el entierro de la caballa lectora, no
pueden cerrar los cines, que ya lo hicieron, pero cierran sus piernas las
diosas del futuro, cierran los puertos y los barcos se escapan, cierran el
Gólgota, por defunción, sierran el árbol de la ciencia, yerran los jóvenes sin
esperanza que buscan futuribles indefinidos allende las alemanias y otras
tierras que guardar, cierran pues las fronteras, trenes que no llegan, pueblos
que esperan el último tranvía. Y los días pasan. Unos tras otros. Los
observadores de las naciones resurgidas del nazismo, los gulag y los obuses, de
los bigotes malencarados y el relámpago en las entrañas, also the most famous
nigger of the world, analizan con entusiasmo la posibilidad de un puente de
carne magra para anexionarse el continente africano. Las primeras conclusiones
abogan por un aumento de las masacres. Señalan a los hombres que gustan del
feminicidio apuntarse a esto de verter carne al mar. Este año tendremos más
gruesas las gaviotas. Mar de fondo y Europa, ese cauce natural del capitalismo entre
los Pirineos y los Alpes, esa puta resabiada propensa al genocidio, da luz
verde al inmovilismo, cuando no es pa mangar, sí señor, andan felices los
mercados frau doña muy señora mía (luce usted tan hijaeputa como siempre).
Rueda la rueda, pasa la vida, las hojas caen, más que nunca en otoño, cuando la
primavera ni está ni se la espera. Qué prisas estas por irnos todos al carajo, ¿no
te parece? Eh, ¿es a mí? es que jugaba el Madrid. Morimos cada día un poquito
más con lo que matamos, más, si contamos a la industria auxiliar, los muertos
indirectos. </span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-89317393436598885062015-08-25T22:51:00.000-07:002015-08-25T22:51:17.852-07:00Nada de barcos<i><br /></i>
<i>Ahora que nos luce el pelo y que las penas parecen menos, que siempre nos ha encantado esto de aparentar y de aplaudirnos, se me hace oportuno la publicación de este cuentecito.</i><br />
<i><br /></i>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQnUACBX16vIXK4OmH0KvqKrnm3N3mlckTQ9hRdyoOoTwP6mzN3N47cqVtcU7f6gIhLY6f1dvJEIL9CPTiU_0-Q2zZjdvbHMdkU1Yymrgi5Ht_f54NE569Lj2RjYxDSSo31IDjA4BBfu2O/s1600/Segundo+Puente.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="425" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgQnUACBX16vIXK4OmH0KvqKrnm3N3mlckTQ9hRdyoOoTwP6mzN3N47cqVtcU7f6gIhLY6f1dvJEIL9CPTiU_0-Q2zZjdvbHMdkU1Yymrgi5Ht_f54NE569Lj2RjYxDSSo31IDjA4BBfu2O/s640/Segundo+Puente.jpg" width="640" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Fuente: Kiki. Diario de Cádiz.</td></tr>
</tbody></table>
<i><br /></i>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;">La
superficie enervada de las aguas de la bahía. Las aguas de la bahía de un verde
mate, como un color muerto. Un verde difunto festoneado de blancos y fugaces
latigazos. Mira el puente a lo lejos, a medio construir. Le gustaría ser el
único testigo de la ola destructora que acabase con su insultante presencia. </span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;"><i>Un puente, para qué un puente; sobre la mar,
un puente. Nada de barcos</i></span><i style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: x-large; line-height: 150%;">. </i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;"><i>Un puente</i></span><i style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: x-large; line-height: 150%;">.</i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;"> No lo dice. Lo piensa del mismo modo
que imagina la ola y de la misma manera que ignora el frío del alba retenido en
el rugoso granito de la balaustrada. Se recuerda veinte años antes. Entonces
apenas pensaba en barcos. Después de recordarse recuerda la última vez que vio
al niño que ya no es un niño y que es abogado. Misteriosamente para nosotros,
lectores o testigos de una ficción que nos invita a pensar que la ficción es la
única realidad posible en este preciso instante; e inexplicablemente para él,
casi una confusión, puente y niño, significan la misma cosa. Como si puente
(que jamás verá construido del todo) y niño hombre abogado anunciasen su
inminente inexistencia.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large; line-height: 24px;"><span style="font-family: Times New Roman, serif;"> </span></span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;">Pero cuando piensa y cuando recuerda
no lo hace de una forma que podamos entender un gesto de autocompasión. A pesar del frío
lleva remangadas las mangas del viejo jersey, las mangas arrugadas por encima de
los codos huesudos, y los puños de la camisa a rayas azul celeste doblados y
sobre el jersey, desnudos sus antebrazos velludos como tensores. Sobre su
cabeza una vieja y descolorida gorra azul de la Armada con un barco gris en
relieve bordado y bajo éste una letra y unos números del mismo color verde
muerto del pedazo de mar atrapado y en sofoco que contempla.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;"><span style="font-size: large;"> </span></span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;">La señora, en la casa, no quiere
saber nada de puentes a medio construir y barcos. Para ella también sigue
siendo el niño. No es el mismo niño que para él. La señora en la casa sonríe
cada noche, ya en la cama, junto a sus ronquidos y la tos que finalmente se lo
llevará a la tumba; sonríe al escuchar a través de las finas paredes los
exagerados gemidos de la muchacha en la casa vecina. Cuando él piensa que la
muchacha vecina es una moza que está de muy buen ver la señora también sonríe
porque sabe lo que él piensa y porque recuerda cuando ella era moza de tan buen
ver como la muchacha vecina y él la miraba y pensaba lo mismo y ella lo sabía.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;"><span style="font-size: large;"> </span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;"> Ni un cigarrillo más</span></i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;">.
Piensa él ahora, sin saber que ya es tarde. Alza con el pulgar de su mano
derecha la visera de la gorra, el puente al frente sobre las torpes olas sin
rumbo, las olas más pálidas en el choque con otras olas. La señora llena un
cubo con agua y lejía en el cuarto de baño del piso de arriba. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;"><span style="font-size: large;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large; line-height: 24px;"><span style="font-family: Times New Roman, serif;"> </span></span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;"><i>No,
ni un cigarro más. Un puente</i></span><i style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: x-large; line-height: 150%;">.</i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;"> Mira de nuevo en dirección al puente. </span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;"><i>Un puente. Sobre la bahía, un puente; nada
de barcos</i></span><i style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: x-large; line-height: 150%;">.</i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 150%;"> Aparta sus manos de la superficie fría y granítica y adelanta su
pierna derecha. Dobla su cuerpo torpemente, lento, un gran esfuerzo,
incómodamente su vientre de escollo para sus vertebras caducadas; y resopla
cuando se deshace del zapato y el calcetín y mientras ondula dobleces
ascendentes en la pernera del pantalón hasta llegar justo debajo de la rodilla.
Repite la acción con la pierna izquierda.</span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;"><span style="font-size: large;"> </span></span></i></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><i style="line-height: 150%;"><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;"> Un puente. Nada de barcos.</span></i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 150%;">
Pasa una pierna sobre la balaustrada y luego la otra y luego desciende a una
roca que no daña las plantas de sus pies porque las plantas de sus pies son ya
también de roca. <i>Al niño le gustaba
cuando sus pies eran cosquilleados al hundirse en el fango.</i> Da un paso y
baja de la piedra y al hundirse levemente en el fango saca una bolsa de
plástico del bolsillo derecho del pantalón. Ya sin mirar atrás, con la
determinación de quien se sabe victorioso y victorioso sobre todas las cosas
que nada importan, como si el tiempo fuese una fuerza aniquiladora e inefable,
y no otra cosa, vida vivida y por vivir; con esa determinación del que se sabe
viejo ignorando que también es sabio, a su manera; ya sin mirar atrás, con esa
determinación, abandona la tierra, pasea como quien nunca conoció la solidez de
la tierra firme, bahía adentro, sobre el fango en dirección al puente, por el
fango.</span></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-68601272526251634322015-08-20T07:13:00.000-07:002015-08-20T07:13:06.245-07:00Apología y petición (Jaime Gil de Biedma)<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Y qué decir de nuestra madre España,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">este país de todos los demonios<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">en donde el mal gobierno, la pobreza<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">no son, sin más, pobreza y mal gobierno,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">sino un estado místico del hombre,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">la absolución final de nuestra historia?<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">De todas las historias de la Historia<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">la más triste sin duda es la de España<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">porque termina mal. Como si el hombre,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">harto ya de luchar con sus demonios,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">decidiese encargarles el gobierno<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">y la administración de su pobreza.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Nuestra famosa inmemorial pobreza<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">cuyo origen se pierde en las historias<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">que dicen que no es culpa del gobierno,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">sino terrible maldición de España,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">triste precio pagado a los demonios<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">con hambre y con trabajo de sus hombres.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">A menudo he pensado en esos hombres,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">a menudo he pensado en la pobreza<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">de este país de todos los demonios.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Y a menudo he pensado en otra historia<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">distinta y menos simple, en otra España<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">en donde sí que importa un mal gobierno.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Quiero creer que nuestro mal gobierno<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">es un vulgar negocio de los hombres<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">y no una metafísica, que España<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">puede y debe salir de la pobreza,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">que es tiempo aún para cambiar su historia<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">antes que se la lleven los demonios.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Quiero creer que no hay tales demonios.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Son hombres los que pagan al gobierno,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">los empresarios de la falsa historia.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Son ellos quienes han vendido al hombre,<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">los que le han vertido a la pobreza<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">y secuestrado la salud de España.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pido que España expulse a esos demonios.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Que la pobreza suba hasta el gobierno.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Que sea el hombre el dueño de su historia.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Times New Roman, serif; font-size: large;"><span style="line-height: 18.3999996185303px;"><i>(Después de esto apenas queda nada que decir. No existen las justas palabras que obliguen o recomienden al ánimo de la lectura breve; leer estos versos y después nada más, no leer más sino pensar, de forma activa, como harían si lo fueran los seres pensantes de un Mundo a la deriva gravitacional del Universo. Después de esto el español, ese huerfanito lastimero, ese palestino sin cojones ni vergüenza, debería concederse lo que dura un cigarro y volar -que en ocasiones, para nosotros, criaturas que se creyeron lo del infierno y el paraíso en algún momento, es como pensar, de forma sencilla y sin complejos-, volar el aire cálido del verano -otro más- que dejamos escapar. Después de leer estos versos uno debería reescribir aquel aforismo de Benitez Ariza y correr hacia el espejo; no leer más, como si lo leído ya fuera suficiente, como si fuera tal que una cita en la que nos prometimos "una solo, luego para casa". Así creo yo que se debería hacer después de esto, porque pocos lo escribieron igual, sobre España, en redondilla y minúscula, despojado de la falsa gloria y la injusta gloria que una vez creímos heredada y que ahora más que nunca sabemos inexistente o breve, distinta tal vez, falsa en cualquier caso o ineficaz de cara a un futuro en el que difícilmente caeremos de pie. Después de leer el poema de Gil de Biedma, de este poema, no leamos nada más durante un ratito -es lo más que puedo llegar a esas justas palabras-, dediquemos la mirada a cada cosa a nuestro alrededor y definamos un nuevo cosmos en el que todo es diferente porque lo hicimos diferente, más sencillo, menos nocivo, más justo en el sentido literal del término y menos homicida, en el sentido literal del término. Busco las justas palabras que inciten al mal pagado gesto y perdida costumbre de reflexionar como si fuera útil -o más bien necesario-. Háganse un favor tal y como procura este amigo que les quiere bien, al fin y al cabo: quítense la ropa, lean el poema. Luego me cuentan). </i></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-40198300190681788632015-08-02T19:43:00.000-07:002015-08-02T19:43:23.082-07:00Cecil, el león<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: left;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyMke4436OrhPct5p1uDJEtKSWYilLrTFjCsiUZaOnIRcpSi0e5xBBlLVs5-gSyFC839T3C3MzejbS2dZZupQ3ISi-KbIL3aMhTDMzaDFSb4EfIRhDeSHbR1Pajmatq6GGcUoi_j3dugZt/s1600/Jeric%25C3%25B3.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="226" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyMke4436OrhPct5p1uDJEtKSWYilLrTFjCsiUZaOnIRcpSi0e5xBBlLVs5-gSyFC839T3C3MzejbS2dZZupQ3ISi-KbIL3aMhTDMzaDFSb4EfIRhDeSHbR1Pajmatq6GGcUoi_j3dugZt/s320/Jeric%25C3%25B3.jpg" width="320" /></a><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%; text-align: justify;">Nunca había oído hablar
del león Cecil, nadie en realidad, jamás escuché a nadie preguntar "¿qué
tal sigue el bueno de Cecil?" ni a otro respondiendo "bien, está muy
bien, el bueno de Cecil, no veas cómo se pone el tío de ñúes y facóqueros y antílopes,
allá por las sabanas de Zimbabue". Por otro lado, los leones siempre han
estado en las peores de mis pesadillas. Sí, de vez en cuando sueño con leones (</span><a href="http://lavictoriadelacarne.blogspot.com.es/2014/12/la-pesadilla-es-la-siguiente-dos-leones.html" style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: x-large; line-height: 115%; text-align: justify;">razón
aquí</a><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%; text-align: justify;">); y es horrible; son hermosos animales, desde luego, pero los prefiero
allí, en su sabana, rugiendo y abúlicos, elegantes y hermosos felinos, o en la
tele, acechantes y letales como son, tal y como aparecen en mi sueños. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;">Pero no,
no sabía yo que en Zimbabue vivía este enorme felino, el gran Cecil, líder de
su manada, un símbolo para las criaturas bípedas e implumes que lo conocían, icónica
encarnación del mito del viejo rey de la selva africana. El león Cecil murió
tras dos días de inimaginable agonía, el animal huyó malherido de sus
perseguidores tratando de mantener su monárquica dignidad hasta el último
aliento, rugiendo tal vez, de incomprensión -como nos sugería el bueno de Félix
Rodríguez de la Fuente que hacía el lobo con su aullido-, o por no llorar, o
más bien creo yo como una forma de cagarse en los muertos del tipo que
cobardemente y a distancia se la había jugado, como última experiencia vital;
pero rugiendo decía, Cecil el león, al cielo -próxima parada-, a ese espacio
sobre su cabeza que muy de vez en vez le daba en la estación húmeda por mojar
con frescas gota de lluvia su espesa y negra melena, rugiendo hasta que murió.
Así huía Cecil, el león, herido cobardemente a distancia y de muerte, las
heridas producidas por las flechas fabricadas por el hombre y empleadas como
solución a una especie de capricho de difícil defensa y, en este caso, hiriente
para la opinión pública. Claro, estamos más sensibilizados, eso parece, o eso o
que los directores de periódicos saben a la perfección -¡cuánto saben los
directores de periódicos!- que este tipo de noticia entra muy bien a la
sociedad ociosa en el estío. </span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;"> </span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;">A los dos
días murió, Cecil, el león. Después su perseguidor lo desolló y le cortó la
cabeza o mandó a un negro a que lo hiciera, como es costumbre por la zona, ya
que iría dentro del pack de los cincuenta mil: alojamiento, desayuno, comida y
cena; caza de insigne león y al menos un negro que le corte la cabeza y le
arranque la piel.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhzWGSaGIuyrbMAKkCgIXKTzu6EuDJtuaiS9162z0yNdS2cXu0DCFygd3JirDzAUz4-mUohzHL1xNgyzPNn9lOgASstcJCb6i6o3k5rqlU3RoUePP5CoBkFxbbFrlIT3E90p8iT09ckFyrQ/s1600/Cecil.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhzWGSaGIuyrbMAKkCgIXKTzu6EuDJtuaiS9162z0yNdS2cXu0DCFygd3JirDzAUz4-mUohzHL1xNgyzPNn9lOgASstcJCb6i6o3k5rqlU3RoUePP5CoBkFxbbFrlIT3E90p8iT09ckFyrQ/s400/Cecil.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;">¿Cómo fue?: los tipos,
pongamos una partida de unos tres o cuatro, se acercan en todoterreno a las
inmediaciones del Parque Natural de Hwange. Deciden entrar, llevan consigo o
cazan otra presa de tamaño considerable pero de menor valor. Los nativos saben
bien por dónde para el bueno de Cecil. Lo ven, a Cecil, estos energúmenos,
amarran a la trasera del todoterreno el cebo "deja cable, cohone, que
valiente soy un rato, pero el bicho ese lo quiero lejos (imaginen índice y
pulgar en forma de pinza) hasta verlo así de chiquitito", y arrastran el
cebo, despacio según el trotar felino, al ritmo de pío pío leoncito. Gente
valiente, ellos, y león, el bueno de Cecil, león con hambre, la trampa parece
funcionar, los sigue. La partida consigue sacar al animal fuera de los límites
del Parque. Una vez allí, legalmente, gente valiente y furtiva, unos verdaderos
hijos de la gran puta todos ellos en realidad, que todo hay que decirlo, dan
caza al león de nuestras entretelas, con un arco y sus flechas, por supuesto, y
mano al menos un par de buenos fusiles del doce, cartucho en recámara
"vamos a dejarnos de tonterías", con sus respectivas cajas bien
llenas de más munición.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRNawFmuZyLkBXZCeLahANNo9nRANNF28NGbA6GVwplW-_HMqXRcy3xca2Npt9dPVNWCGFCGXleKhAU9Y9BPyklP5sPvBSbdZsvWZr5jcvIIwUBmkq6uAMjoUUf3mw4qWSgDFHHQfmPSiO/s1600/walter--644x362.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" height="223" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRNawFmuZyLkBXZCeLahANNo9nRANNF28NGbA6GVwplW-_HMqXRcy3xca2Npt9dPVNWCGFCGXleKhAU9Y9BPyklP5sPvBSbdZsvWZr5jcvIIwUBmkq6uAMjoUUf3mw4qWSgDFHHQfmPSiO/s400/walter--644x362.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Se dice del cazador,
Walter James Palmer, que </span></span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">es </span></span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">dentista </span></span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">y </span></span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">estadounidense -no español como se rumoreaba,
vete tú a saber por qué, </span></span><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;">Su Majestad ya no tiene
el coño para farolillos- y que pagó unos cincuenta mil pavos por la historia. Y
es que el dinero no da la felicidad, eso por supuesto, pero tampoco es menos
cierto que unas perras echan el cable para conseguirla. La felicidad de Mr.
Walter pasaba por matar y decapitar y desollar a nuestro ya difunto amigo, el
león Cecil. Sí, cuando unos son felices comiendo helado o pelando gambas o
cascándosela en el baño Mr. Walter es feliz matando leones porque sí con un
arco y un carcaj hasta las trancas de afiladas flechas.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;">Pero, oh, pobre Mr.
Walter, de pronto aparentemente infeliz, te trincaron, y ahora estás muy
arrepentido y lloras desconsoladamente mientras miras quizá la cabeza disecada
y colgada en tu sala de trofeos, junto a otras cabezas, leopardos y osos
polares, por ejemplo. Oh, pobre Mr. Walker, dentista de profesión, ahora toda
la hipocresía del mundo civilizado vuelca sobre tu fotografía en Facebook y Twitter
ingentes cantidades de rabia contenida. Aquí un amigo, Mr. Walker, no te
preocupes, yo te consuelo: esto mañana ya no es noticia.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;">Tipos como Walter James
Palmer se encuentran, sus fusiles cargados, ahora mismo, en cualquier otra
parte de ese continente desde antiguo expoliado que es África, descojonándose
de su compañero de afición -esto es, matar por el simple hecho de matar-, por
su torpeza y su posterior y fingido y vergonzante victimismo.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEicVdTRnqErYTa1xVVpGBbZ9MEOdGSuRnhYtSlFtO6jjJ39-RVsMWAKPvZPlciEbkr1WAoRbR5ebm1Yrg1UpslYxdsLua-tLmo9r62e52D_7khv3vlgeCQcAqCsft4-wg7Budq9PjqslaI5/s1600/rinoceronte--575x323.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" height="223" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEicVdTRnqErYTa1xVVpGBbZ9MEOdGSuRnhYtSlFtO6jjJ39-RVsMWAKPvZPlciEbkr1WAoRbR5ebm1Yrg1UpslYxdsLua-tLmo9r62e52D_7khv3vlgeCQcAqCsft4-wg7Budq9PjqslaI5/s400/rinoceronte--575x323.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;">Según el diario </span><i style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: x-large; line-height: 115%;">El mundo</i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;"> Zimbabue reconoce una población
de un par de miles de leones. De estos dos mil unos setenta son cazados cada año.
No recuerdo haber visto nunca en Mercadona la carne de león, en ese pasillito
más bien fresco que comparten las carnes y los embutidos, que me prefiguro dura
como un leño y algo seca. La cabeza de león así como su piel -y la piel del
leopardo o la pantera- es un trofeo como lo son las manos de gorila, como es un
"potente afrodisiaco" el cuerno de rinoceronte (Sudáfrica, año 2010,
333 rinocerontes; año 2011, 448 rinocerontes; año 2012, 668 rinocerontes; en
adelante, la cifra ya no son fiables, es mucha pasta la que se mueve en Asia),
todas estas, especies gravemente afectadas por la caza en general. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjw4agpA6RpSqjbyfpCrJe9fjkCOybp2T0nDdmsuWJUB8QLlxhLBDrzwiqE_9Eo8oO1kzSDYSYKLpQ6sLuJus__-gN4T4BONYyhc5k2E8NMsZ4iFSnlfweEezGJTR1TzhOSjZB50g2h68Ff/s1600/1358274198739.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em; text-align: center;"><img border="0" height="273" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjw4agpA6RpSqjbyfpCrJe9fjkCOybp2T0nDdmsuWJUB8QLlxhLBDrzwiqE_9Eo8oO1kzSDYSYKLpQ6sLuJus__-gN4T4BONYyhc5k2E8NMsZ4iFSnlfweEezGJTR1TzhOSjZB50g2h68Ff/s400/1358274198739.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;">Lo que se
traduce del dato numérico es que setenta viene a ser el número que se declara
en cuanto a lo que a la caza de leones se refiere. No hace falta ser vecino de
Lubimbi, Tande o Hwange -poblaciones cercanas al conjunto de parques y
reservas- para saber cómo funcionan las cosas por allí. Lo que verdaderamente
se traduce del dato estadístico es, que, leones, lo que vienen siendo leones,
así como nuestro amigo Cecil, al que todos deseamos hoy que Dios tenga en Su Gloria
en un súbito y más que probable fugaz sentimiento animalista, han de caer
anualmente a cascoporro, y sí, la muerte de Cecil es realmente una tragedia,
una tragedia extrapolable a muchas otras especies y probablemente mucho mayor
de lo que ahora pensamos y que por supuesto pensamos mientras los medios lo
decidan.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; font-size: large; line-height: 115%;">No tardará Nessie en
esconder su cabecita. Tampoco tardarán los Mr. Walter James Palmer en apuntar
con el arco, de hecho está ocurriendo ahora. Y ahora. Y ahora también...</span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-17919414395767897752015-07-21T21:39:00.000-07:002015-07-21T21:39:28.146-07:00Saboread el cálido amargor de vuestra derrota.<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Detengamos la máquina
generadora de ilusiones. Sí. Bajemos las revoluciones, poco a poco, tampoco
queremos que se rompa. La hélice, lentamente, se va dejando ver, vemos que es
hélice y no circunferencia de espuma rabiosa. Seamos realistas. Eso es. Realistas.
¿No somos al fin y al cabo hijos del primer mundo? Seamos realistas, que no es
tan malo.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Y la realidad es ni más
ni menos que nada podemos hacer para cambiar las cosas. Las cosas son. Nada
más. Jamás tuvimos en nuestras manos por medio de la democracia la capacidad de
mover el más mínimo átomo de nada. Eso es realismo. Fue todo tan fácil, es tan
doloroso además ejercitar la memoria, tan cómodo y opiáceo el olvido.
Detengamos pues toda intención de pensar en que un mundo mejor es posible
porque no lo es. Siempre habrá alguien que aparezca de entre las sombras y le
hables y te mire raro y tú te sientas poco menos que carajote cuando le digas
que crees en algo que está muy por encima de su religión superficial y barata.
Siempre surgirá alguien, de lo oscuro, que te diga, seamos realistas. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Hagan el favor de
tenerme la máquina a ralentí un poco más.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">El realista es ese tipo
que no ha visto, que no mira o que lo hace sin ver, es, el tipo, incapaz de
estremecerse ante la mano que se le coloca delante de las narices cuando le
piden una limosna. Mira la mano con desprecio porque no sabe lo que ve. Es ese
tipo, el realista, uno que sabe que sus hijos duermen cada noche en una cama
cubierto de sábanas, mantas y colchas. Claro, si no ha visto no puede imaginar.
No ha visto a otros niños como el suyo jugando al fútbol cerca de un campo de
minas. Nunca un niño le ha ofrecido con una extraña sonrisa un pepino de ciento
cinco sin explosionar. Ni siquiera sabe que hay niños en algún lugar que con
solo diez meses sobre la faz de la Tierra son capaces de correr a zancadas tras
un coche para pedir un poco de agua. Ese es el realista, el que te dice esto es
lo que hay. A mí me ha tocado bien y a otros mal. Sé realista, tipo ingenuo,
iluso. Lo llevamos a ralentí dijimos.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Un ejercicio de
realismo es decir que en España no existe la pobreza porque pobreza es lo que
hay en África. Como no ha visto tampoco sabe que en África, en el continente
negro, pobreza es un término bastante inexacto e injusto. No se le puede llamar
pobreza al Holocausto Africano, ni a la mayoría de las miserias que se dan en
Asia, Sudamérica o Centroamérica. No lo puede imaginar porque no lo ve, no lo
muestran los medios si no proporciona por lo inmediato suficientes beneficios,
si no es noticia candente, y noticia candente no puede ser la brutal mortandad
infantil, eso no es noticia, noticia sería, por ejemplo, que el ébola se
expandiese de tal manera que, en el peor de los casos, con una mínima
probabilidad, pudiese llegar a Europa. Eso es noticia, porque es terror y el
terror mueve dinero, de un modo u otro. No es noticia que la malaria siga
siendo la enfermedad más mortífera de África, por encima del sida, cuando la
erradicamos de Europa en un échate pa´llá que hace caló. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">El realista, por lo
general, está conforme con todo. Aquí, en España, recuerden, el país del dolor
de huevos, el realista, que también es el correcto, se conforma con todo, se
conforma con que estén en su sitio los mismos de siempre, los que le mantienen
ahí, en ese realismo inamovible, mientras la cosa funcione, que claro,
funciona, cómo no, sobre todo si somos incapaces de mirar a otro lado, no al
otro, no al casi semejante, no al que lo pasa mal, no al casi pobre. Ellos son
realistas, han nacido en el momento oportuno en el lugar indicado.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Como no podemos pedir
semejante esfuerzo, tal capacidad de sacrificio, lo mejor, es pedir al resto
que detenga la máquina de las ilusiones. Sobrevivan. Así, a ralentí, motor
diesel, contenido, apretando las muelas, cada vez, un poquito más. Podemos
pedir eso. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">O tal vez no.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Quien lleva en el pecho
un corazón hasta las trancas de sangre hirviente no puede dejar morir sus
ilusiones, no puede consentir ciertas cosas. Y sí, tenemos la suerte de no
vivir un holocausto como el africano, pero cada vez es más palpable, más
irrespirable el aire, más lejano el umbral del dolor. Han depositado sobre
nosotros la muerte en vida, no es una exageración, mira y ve, joder, a tu
alrededor, casi imposible ganarse la vida, sueldos indignos, contratos
miserables, la muerte en vida, sí, como en aquellas distopías de la literatura
y el cine, esas en la que existen los afortunados, viviendo de la suerte que no
han ganado o que han ganado de forma mezquina, esas mismas en las que el resto
son los desechos sociales que laboran la cuna de sus riquezas. Que no es una
exageración, que está ahí, lo vemos cada día. Si miras lo ves. Si tú miras, no
más allá de tus parientes más cercanos, los ves, mendigando el pan,
arrastrándose por un puesto de trabajo, los ves. Esa es nuestra verdadera
realidad y no otra. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pero existen los que
llevan dentro del pecho un corazón hasta las trancas de sangre hirviente y no
pueden dejar morir sus ilusiones, la creencia de que un mundo mejor es posible.
Es muy poca la capacidad de maniobra, apenas nada, un resquicio en las leyes
quizá, nada, o casi nada, lo justo para que muy de vez en cuando nuestro
sistema político permita que se generen algunos partidos al margen de lo
conocido, en principio ni mejor ni peor, desconocidos, diferentes, llevando
consigo un mensaje de ilusión. Ilusión, aquello que repatea las tripas del
realista que impone su conformismo acomodado con un sé realista. Así que
detengamos la máquina, hasta aquí habéis llegado, saboread el cálido amargor de
vuestra derrota. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">O mejor no, qué
cojones, que nadie toque nada, la mano fuera de la consola de mando, que nadie
se mueva mecagoendiós, ilusiones, de eso es de lo que se trata, de
conservarlas, de mirar, de ver, de creer que lo merecemos, de eso, seamos
combativos, que ya la guerra está perdida, mejor morir matando.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">***<o:p></o:p></span></span></div>
<div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Hay quien celebra lo
ocurrido en Grecia. En Grecia ha ocurrido que se ha puesto un pie sobre las
ilusiones, la han descabezado, y hay quien lo celebra. Apenas han dejado
respirar a Tsipras desde que el sistema político griego lo nombró primer
ministro. Y aquí en España nos lo han mostrado a todo color. Eso sí teníamos
que verlo. El gobierno de Tsipras y su voluntad de luchar por las ilusiones fue
ratificado de forma asombrosa por una mayoría de griegos en sonado referéndum.
Fue tan bonito mientras duró. Cabeza de turco Tsipras ha sido sacrificado y con
él todo el pueblo griego. En España hay quien se alegra, también quien ha
vivido la tragedia griega como propia, el pisotón ha sido tan grande que
alcanzó en gran medida la ilusión en el país de la Ñ. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">No es casualidad. Lo
que está ocurriendo en Cádiz se le asemeja bastante. ¿Cómo empieza todo? Es muy
sencillo. El alcalde de Cádiz llega al ayuntamiento como quien entra en una
trampa mortal. Es el peor de los escenarios políticos posibles. El partido que
facilitó el hecho, quien le puso la zanahoria, el PSOE, representado por Fran
González, un tipo ruin a todas luces, sin más oficio ni beneficio que el de
trepar en la política, una vergüenza de tipo en realidad, fue largo como solo
un partido de tales características y currículum puede serlo. Echaban a la peso
pesado de Teófila Martínez del ayuntamiento, su cortijo, su expositor de joyas,
después, todo sería coser y cantar. Y lo está siendo, no sin ayuda.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">La campaña de
desprestigio, el acoso y derribo a José María González "Kichi", es
una aberrante historia de la infamia. En lugar del sano escepticismo con que
deberíamos observar sus movimientos en el ayuntamiento, en vez de eso, se ha
optado por ponerle encima la lupa que nunca tuvo la anterior alcaldesa, tal vez
por temor a su ira. Y es aquí donde entran los medios de comunicación. Pasen y
lean, de verdad, a los esplendidos columnistas y blogueros, no tiene
desperdicio. Mientras tanto, en el resto de España, la estrategia es más
insidiosa, menos directa, se ataca al nuevo y amplio espectro de la izquierda
inoculando la mala sangre del terror en el pueblo. Se habla de populismo,
acusan y señalan hablando de populismo poniendo bajo el título la fotografía
del temible Hugo Chávez. Claro que es populismo, por supuesto que lo es, ¿cómo
si no despiertas a un pueblo dormido desde siempre, el pueblo que ha permitido
que le roben a manos llenas delante de su cara? Es populismo y es mover el
asiento de quienes se creían obligados a ser víctimas y espectadores, un
populismo que les recuerda que aún pueden permitirse soñar con que sus hijos
tendrán una vida mejor.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">En Cádiz tenemos tipos
como el señor Fernando Santiago, más que periodista, polemista, que es lo que
le va, la polémica. No duerme, no descansa, su campaña debe ser personal, no se
me ocurre otro motivo. Día tras día el tipo insiste en señalar cada paso del
alcalde. Tal actitud es sospechosa. También es sospechoso el caso de la famosa
historia del cónsul alemán, esa leyenda urbana que circulaba por mensajes de un
móvil a otro hasta acabar en las páginas del primer periódico de la ciudad en
un artículo claramente dirigido a la demolición. Por otro lado está el
periódico La Voz. Alabado y aplaudido ha sido el artículo en el que se
criticaba la conciliación familiar por el hecho de que el alcalde procura no
ser solo un animal político. Y bueno, todo esto es sospechoso, lo es, todo en
su conjunto, podríamos seguir enumerando jugadas y no parar. Ni seis meses en
el ayuntamiento y ya se puede decir que al alcalde de Cádiz se lo han cargado.
Gran parte del trabajo lo han hecho los periodistas. Qué grande les queda el
título, joder, qué pena estudiar toda una carrera universitaria para
convertirse en títere, por unos míseros euros. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Todos estos que hacen
el juego sucio también empujan el pie que pisa la capacidad de ilusionarse de
los ciudadanos más perjudicados por el momento político y económico. La
responsabilidad es grande, son cómplices de los que están causando tanto mal. Culpables son.</span></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-72231645695224557572015-07-19T09:07:00.000-07:002015-07-19T09:07:18.325-07:00Cuenta la leyenda (la aventura de un cónsul alemán en la ciudad de Cádiz).<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Imaginen. Esa luz tan
especial de Cádiz en una mañana cualquiera de verano. Esa plaza de San Juan de
Dios, reluctante, paseada, el puerto a sus pies, curiosamente libre de enormes
navíos cruceros. Y esa gente, tan graciosa, sí, esos gaditanos como figurantes
de una Venecia sin canales, esos simpáticos gondoleros. Así podría comenzar la
leyenda.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Cuenta la leyenda de
cierto cónsul aventurero que cierto día, en el desempeño de sus funciones, hubo
de dirigirse al ayuntamiento de la ciudad de Cádiz. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiajI8-ZMd85kCyJrLKDi8C9LEDderv7_ONI0bEkUxSN3eHDtO1_i63v3l11-hZraxdCvaJICS7grr3yM0JzyIOERbAouAEG0aPGQ3cr8QNw25BIfj-99hsvdc5g-f4_GrmjBixopgDbXDO/s1600/images.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="227" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiajI8-ZMd85kCyJrLKDi8C9LEDderv7_ONI0bEkUxSN3eHDtO1_i63v3l11-hZraxdCvaJICS7grr3yM0JzyIOERbAouAEG0aPGQ3cr8QNw25BIfj-99hsvdc5g-f4_GrmjBixopgDbXDO/s640/images.jpg" width="640" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Imaginen ahora, esa luz
tan especial; imagínenlo, al cónsul, con maletín y sombrero si quieren, al pie
de la Casa Grande gaditana, cual padre Merrick, sin bruma diabólica pero con un calor del demonio, trajeado y
sudando por dentro del traje, el cónsul alemán del que os hablo. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pues eso, que cuenta la
leyenda que el hombre había solicitado audiencia para verse con el nuevo
alcalde con motivo de la próxima visita al puerto del buque escuela alemán. Y
cómo cae el sol por san Juan de Dios en verano. No es improbable que el hombre,
el cónsul alemán, sudase por partida doble. Por un lado los rayos blancos y
amarillos y verticales, por otro, el nerviosismo de la misión. Digamos que era
rubio y alto, sí, la cabeza como un dado de parchís; pero sudaba. Ya saben lo
que cuentan las leyendas del alcalde de Cádiz. El nerviosismo de nuestro cónsul
no era para menos.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Le facilitaron el
acceso sin mayor problema. Distintas versiones de la leyenda hablan de cómo
tuvo que sortear alguna especie de cancerbero propio de la tierra, uno que
parece ser había sido encontrado por Iker Jiménez la vez que había estado
investigando por la Casa del obispo. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pero las fuentes más
fiables dicen que no, que hasta le ofrecieron agua y todo, al verlo así, al
pobre hombre, la gota de sudor resbalando por la sien izquierda, la mano
sudorosa asida al maletín, rojo el rostro como el más vivo de los salmonetes,
le dieron agua al atribulado cónsul alemán. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Siguió nuestro cónsul
por pasillos estrechos de techo bajo y antorchas iluminando el recorrido al
técnico encargado de llevarlo al despacho del alcalde, de quien había oído
historias terribles: una vez llegó a mostrarse indignado públicamente por un
desahucio. Aquellas historias no dejaban dormir al cónsul en sus escasas horas
de descanso en su retiro gaditano-alemán. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKzyI3PGM7QcrGQrNYl1aa2QS47SibIsgUspZ5CvhLjvId1jGprDsq1HrHSJHtcFwQjaH8Wboz3XmmlJ7q8WtJ6U_9513A4oy6xOy15WLcwdcrYYMxW49kaBnOKQF4V-BreIqWx45vQnnu/s1600/nosferatu.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKzyI3PGM7QcrGQrNYl1aa2QS47SibIsgUspZ5CvhLjvId1jGprDsq1HrHSJHtcFwQjaH8Wboz3XmmlJ7q8WtJ6U_9513A4oy6xOy15WLcwdcrYYMxW49kaBnOKQF4V-BreIqWx45vQnnu/s400/nosferatu.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Fue tras dejar el angosto
pasillo (habían subido y después bajado escaleras de caracol, pasaron junto a
celdas oscuras cuyos moradores se mantenían a la sombra y solo, en algún
momento, de aquellas celdas, surgió una risa que al cónsul heló la sangre y
erizó el vello rubio de su nuca) que el técnico del ayuntamiento se detuvo y aún permaneció de espaldas a él unos segundos que debieron parecerles eternos.
Sin duda alguna, habían llegado. </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Cual cochero de Drácula el técnico sobre
alargó su brazo izquierdo e indicó al cónsul un desvencijado banco de madera
malherido por la carcoma. El cónsul alemán se sentó, su piernas juntas, rodilla
con rodilla, el maletín sobre las rodillas, las manos, ambas aferradas al asa
de piel fina del maletín, sudando las manos. Solo cuando el cónsul se sentó
pudo observar la enorme puerta de doble hoja y de nobles maderas entreabiertas
ante él. De la habitación al otro lado y por el espacio vacío entre portones asomaba
una luz mínima, como serían los últimos fuegos en la noche de una chimenea,
como el anochecer en el infierno, así la luz. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdyRPyI-_ODG6na3FuhaTMf4ViYzSXszfoekHm3eN5pCwdIHCsoB23oRwdpSYpaJkpq4xyxuMb6MDNaFAl760bOOYjQtiwZyHJibxqeuLplLqAqHlnwYSb7heSULHDs64e-d8-wKduGPAa/s1600/el+proceso.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdyRPyI-_ODG6na3FuhaTMf4ViYzSXszfoekHm3eN5pCwdIHCsoB23oRwdpSYpaJkpq4xyxuMb6MDNaFAl760bOOYjQtiwZyHJibxqeuLplLqAqHlnwYSb7heSULHDs64e-d8-wKduGPAa/s400/el+proceso.jpg" width="369" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">No voy a decir que
temblaba porque no. Era alemán. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">En el interior del
maletín los documentos sí temblaban. El cónsul, en el retiro de su refugio
gaditano-alemán, había pasado incontables horas ensayando la articulación de
las palabras a las que pretendía dar cierto toque gadita por aquello del pasado
oscuro que en otra leyenda se contaba del alcalde. Había salido en una
comparsa, era residente del barrio de la Viña. No había dejado nada al azar.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhdZxIft2DhhfpIlUAB5yoEUxX8QP7E5x2mYQwLjaWyfccf0REjYRDsdxAwZV8TYMj6HMuHIsCl5ZRrQ6Bi9OlDXcc425zb8Nb_U6t1gO-D_fzI_HWq-uSL8s6k6yc7HA-olq5FSKdkJn95/s1600/KICHI.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhdZxIft2DhhfpIlUAB5yoEUxX8QP7E5x2mYQwLjaWyfccf0REjYRDsdxAwZV8TYMj6HMuHIsCl5ZRrQ6Bi9OlDXcc425zb8Nb_U6t1gO-D_fzI_HWq-uSL8s6k6yc7HA-olq5FSKdkJn95/s400/KICHI.jpg" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pero ahora se
encontraba allí, ante la puerta flanqueada de teas humeantes, el sol fuera, tras los muros, en
el silencio de una antesala, el eco lejano del teclear siniestro en viejas
máquinas de escribir. Y estaba solo. En su mente un único pensamiento, la
misión.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pasaban los minutos, y él allí, con su misión sobre las piernas.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pasaron las horas, dos
al menos. Silencio.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Una hora más pasó, un
terror irracional -o quizá una hinchazón en los testículos- sustituyó al
nerviosismo. Fue entonces que el tableteo de unos zapatos de tacón lo sacaron
de su angustioso monólogo interior, ese debate interno en el que se ponía en
duda su germanía.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">La vio y se dijo, <i>una secretaria.<o:p></o:p></i></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><i><span style="font-size: large;"><br /></span></i></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Ella no le miraba. Se
dirigía indudablemente al despacho del alcalde y no le miraba. Así que se decidió
a tomar la iniciativa. Al fin y al cabo era alemán. Cuánto había pensado en
frau Merkel a lo largo de todo este sufrimiento, en lo que ella pensaría de él,
si lo viese, todo un cónsul de esa nueva Alemania que volvía a poder permitirse
tocarle los cojones a todo el mundo. En fin, que levantó la mano, el cónsul.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Ella seguía sin
mirarlo. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Habló.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;">Disculpe,
señorita, ¿tardará mucho el señor el alcalde?</span></i><span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"> Lo dijo sin
dejar de sonreír, lo más gadita que pudo, un acento como de Cortadura mezclado
con esperanto.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Ella entonces se detuvo
ante la puerta y esta vez sí que se giró y le miró y le sonrió tal y como hacen
algunos animales. No dijo nada. Entró en el despacho. Pasaron no menos de
treinta minutos.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Se sumía en una especie
de letargo cuando el abrirse de una de las hojas de las puertas del despacho
arañó el silencio y los oídos del cónsul seguido de la presencia de la
secretaria siniestramente sonriente y de la voz del alcalde, al fin, una voz
como procedente de las mismas entrañas del posible infierno existente en el
fondo de la Bahía que bañaban las aguas de la díscola ciudad, la voz del
alcalde, en grito, ordenando su marcha, con extrema crueldad, empleando
adjetivos crueles, señalando cruelmente a su frau Merkel, la voz cruel del
alcalde de Cádiz. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Cuenta la leyenda que
aquel cónsul nunca llegó a salir del ayuntamiento. Hay quien dice que se le
puede ver pasear por los pasillos de la Casa Grande en camisa de tirantes,
pantalón corto, calcetines y chancletas, siempre aferrado al maletín que era su
misión, con el recuerdo de ese buque militar que debió llegar algún día al
puerto gaditano. Cuenta, la leyenda, que los técnicos le dan de comer, como
hicieran con Canelo los celadores del Puerta del mar. </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pero esa ya es otra
leyenda. <o:p></o:p></span></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-20952291509590983152015-07-15T08:16:00.000-07:002015-07-15T08:16:34.482-07:00Echar cojones lo llamo yo.<br /><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgto2KDqjKDjlz0oA2yb3LNNL5_aYF47cjvXNoHBLe-EiWlknghI-qrjy86ApX5Vad5eBj4-E3Bm0V1EmUJUiuKqZKT9fs_yQvRn_W5qf7rBaqsi5e-7raDMeSNArGLM8Ik0OLvFAPlccpC/s1600/papavassileou-troikq.gif" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="225" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgto2KDqjKDjlz0oA2yb3LNNL5_aYF47cjvXNoHBLe-EiWlknghI-qrjy86ApX5Vad5eBj4-E3Bm0V1EmUJUiuKqZKT9fs_yQvRn_W5qf7rBaqsi5e-7raDMeSNArGLM8Ik0OLvFAPlccpC/s400/papavassileou-troikq.gif" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Lo que está ocurriendo en Grecia.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Todavía me sorprende la
escasa reacción o la indiferencia del españolito medio ante lo que está
ocurriendo en Grecia. No estamos poniendo las barbas a remojar, que es lo que
toca. Lo peor de todo es quizá el discurso de ese lote informe al que llamo
escasa reacción. Que se sepa el complejo de superioridad -mal que aqueja
gravemente a los alemanes desde antiguo- no es un trastorno contagioso. Ah, sí,
nosotros, los españoles, hacemos la cosas de forma correcta, no como los
griegos. Vemos a nuestros políticos tan rectos, tan correctos, ellos, nuestros
políticos, sus formas y maneras son tan... rectas y correctas y pulcras,
guardando las formas, con ese saber estar y esa mirada como de estar
eternamente ocupados en su mundo interior por las preocupaciones de los
ciudadanos, sobre todo en pre campaña. La corrección, la estabilidad, la falsa
apariencia de estabilidad, nos la pone dura y nos pone, la cara, de alemán
Merkeliano. Mi alma por el Bundesbank. Mientras ellos, nuestros políticos,
sepan mantener esa forma de subirse al escenario, pueden estar tranquilos,
nuestro miedo seguirá brindándoles el poder que los alimenta. Alemania dejó de
ser sospechoso, querían cargarse a Grecia, ya no se cortan en decirlo. Supieron
de su incapacidad para entrar en el Euro e hicieron la vista gorda. Después
todo se jodió, lo recordamos, la economía del primer mundo se vino abajo porque
los elementos reguladores (léase gobernantes) de los Estados dejaron las
puertas abiertas a quienes manejaban su parné para que hicieran y deshicieran a
su antojo a escala planetaria; y no contentos, los que manejaban el parné, después del diluvio, volvieron a tomar el
control (léase los mercados), y los gobernantes de los Estados, atados de pies y manos siempre por aquello de la gracia
de don Dinero, procedieron, una vez más, soltando las riendas del caballo, que
total, siempre va en círculo, como en las carreras, como los ponis en la feria.
Las guerras del siglo XXI son diferentes, y a Polonia ahora la llamamos Grecia.</span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZNX49nbnXVIupe6fo8NQKnxqT5LVmr4pZs1ae-YkrMKhqrclurhTHTD-wwo853NAGWDRITJmF6AtREk8tDLWfOdh8F3VJI5Hhsu_AzsnfIAKOkf-09txEL80O0mff9o-dVF8mLTJXprFG/s1600/troika-europa.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="212" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiZNX49nbnXVIupe6fo8NQKnxqT5LVmr4pZs1ae-YkrMKhqrclurhTHTD-wwo853NAGWDRITJmF6AtREk8tDLWfOdh8F3VJI5Hhsu_AzsnfIAKOkf-09txEL80O0mff9o-dVF8mLTJXprFG/s400/troika-europa.jpeg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Un dibujito na más.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Pero en España hacemos
lo correcto, que en España siempre se ha sido obedecer, a los reyes, a los
señores, al dictador, a la troica. Lo demás, vagancias y anarquía. En España
sólo nos ponemos en pie cuando nos lo dice un cura, así ha sido siempre. Nos
enorgullecemos de nuestro valor en aquella mentira mal contada de la
independencia de los franceses, nos enorgullecemos, también, de aquella otra
mentira que llamamos reconquista. Somos así, de inflar mucho el pecho como
gallos de marzo, cuando a toro pasado, y a sabiendas decimos que era toro
porque pudimos verle los huevos, creemos que alguna vez fuimos valientes, y no
como ahora, que mejor hacer la del avestruz, hasta que pase el temporal, como
si lo hubiese, temporal y no mal endémico, como si fuera a pasar.</span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnIz9GXKlRlQq1SOASEzfRGZ7PilqcaetXHCpMhYPJA8s2H21rR3hHqSSLbbaMrZ6CNMMOb-ZtI2ZUq1-U6k-4SYvKKm94sPjeHtyCwXKY4Tp51oWnuOxXnXSjqFAggFrQcokqd8QgYx6c/s1600/rajoy-mariano.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnIz9GXKlRlQq1SOASEzfRGZ7PilqcaetXHCpMhYPJA8s2H21rR3hHqSSLbbaMrZ6CNMMOb-ZtI2ZUq1-U6k-4SYvKKm94sPjeHtyCwXKY4Tp51oWnuOxXnXSjqFAggFrQcokqd8QgYx6c/s400/rajoy-mariano.jpg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Lo correcto.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">España es mucho de
moverse según lo correcto, lo que quienes consideramos correctos dicen que es
lo correcto. Lo decía el señor Marhuenda -muy viajado por lo que se ve- el otro
día en famoso programa de La Sexta: en España no hay pobreza, tomando como
paradigma de pobreza el Holocausto Africano. Es lo que tienen los matices, que
se puede sacar punta a un lápiz y escribir fino y limpio, o bien, dejar punta
gorda, y como siempre he vivido del carajo, pues hala, que no tengo ni puñetera
idea de lo que es la pobreza. Pero en fin, ese es Marhuenda, un señor correcto
que aprecia lo correcto de nuestros gobernantes cuando son los de la escuela de
los reyes, los señores, los dictadores y la troica, los que llevan el cortijo.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Es el españolito medio
y cobarde lo que realmente me preocupa, los que no saben que les han puesto las
barbas a remojar desde hace algunos años, sin preguntar, diría yo, si se ha de
pensar en las últimas elecciones generales (En España, las elecciones generales
vienen condicionadas casi siempre por factores externos: atentados, crisis
financieras). Me preocupan aquellos que no saben realmente qué es tener que
pelear por llevar la hogaza de pan a sus hijos, los que se conforman porque aún
no les ha llegado el agua a mojarle los tobillos siquiera. Tienen una muy pobre
visión de la realidad. Si acaso llevan un kilito de arroz a Cáritas como quien
lleva a un vagabundo a comer en Nochebuena y lo largan antes de las copas. Piensan estos que van a permanecer así eternamente.
Lo piensan porque saben que papá hizo bien los deberes, esto es, apostar a
caballo ganador, siempre la pela, y no hablar más que cuando es quien está a su
lado quien tiene la ocurrencia de decir que no, que ya está bien, que un pueblo
trabajador merece conocer el verdadero significado de la palabra dignidad. Son
los delatores de todas las guerras, los lacayos, los cobardes que miran para
otro lado cuando se le impone al "pueblo soberano" griego medidas
propias del feudalismo más repugnante. Son estos elementos, los hijos de papá de
toda la vida, los que jamás pelearon por la hogaza, los aspirantes a VIP (como
lo son sus papás), quienes hacen el trabajo sucio de los correctos. El
españolito medio, de siempre tan cobarde, no tiene nada que hacer, mira de
reojo a los griegos, y todavía se permite un aire de superioridad.</span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0CJz5mBuL5x_twhPivb3vW7FVI-46SfgiUCQNixUHTu9bKPCwWek_GTAMK3BGXMr7t_guAYElt4IU4dS44WCEJuRbhBIHgvRI-_eNckJXtKWN5jcvhXHoHwUGJc3jsZTxwi0vL4nr_ZC6/s1600/imagen22962g.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0CJz5mBuL5x_twhPivb3vW7FVI-46SfgiUCQNixUHTu9bKPCwWek_GTAMK3BGXMr7t_guAYElt4IU4dS44WCEJuRbhBIHgvRI-_eNckJXtKWN5jcvhXHoHwUGJc3jsZTxwi0vL4nr_ZC6/s320/imagen22962g.jpg" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">España.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Después está esa
amalgama informe y ambigua que llamamos intelectualidad. A poco que uno haya
leído se dará cuenta de que siempre han existido los opresores y los oprimidos.
Fíjate tú que yo, bípedo implume, españolito circunstancial, sin el
bachillerato terminado, soy más de estar del lado de los oprimidos, porque me
es fácil entender que lo de los opresores es más bien una cabronada, se mire
por donde se mire. Pues eso, a la intelectualidad, esos que se saben
intelectuales, en todo esto, ni están ni se les espera, al menos a la mayoría
de ellos. Tenemos un premio Nobel residente en la piel de toro cuyo nombre ha
saltado al papel cuché por la frivolidad de juntarse al conejo más rentable de
España. Sí, al hombre a veces le da por hacer una gracia en columnas de
opinión, pero poco más. El conocimiento deber llevar invariablemente al
humanismo, aunque éste lleve a esa forma de entenderlo que es la misantropía.
Toda visión humanista lleva a considerar inaceptable lo que está ocurriendo con
los pueblos, con esta vindicación de los poderes de siempre para hacernos ver
que siempre han sido ellos quienes nos manejado según sus intereses. Pero ser intelectual
ahora significa otra cosa, es ser más Rafael Alberti que Miguel Hernández, que
por supuesto no era un intelectual. Ser intelectual reconocido quiere decir que
haces caja a base de adoptar posición de ele con los pantalones bajados y a
base de echarse abajo las rodillas. Intelectuales de izquierdas movidos por
egos velados por la causa justa. Intelectuales de derechas, pero sobre todo,
correctos. El arte pasa por su peor momento, ya que cualquier tiempo pasado, ya
saben. Vemos al señor Koons, su arte, el arte de la nada. Vemos la música que
manda, tan falta de contenido en todos sus aspectos. Vemos una literatura banal.
Vemos, es tan obvio, que la vida se nos escapa de las manos. Pero tenemos
demasiado miedo.</span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgS3sBIkSEn95iqw6e6HW3AC0U5k01BioDLyJOMBtYQcE2KUJ9M3gpUmLPtP5iBGFcLTpsXJ60L5FosVWnvPfnFR7V-QeKMDswoXYdP0jmW94ECy0haR2JouqUxp2YKGGoCPgvH5ZKVD0go/s1600/koons-6.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="276" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgS3sBIkSEn95iqw6e6HW3AC0U5k01BioDLyJOMBtYQcE2KUJ9M3gpUmLPtP5iBGFcLTpsXJ60L5FosVWnvPfnFR7V-QeKMDswoXYdP0jmW94ECy0haR2JouqUxp2YKGGoCPgvH5ZKVD0go/s400/koons-6.jpg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Arte.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipcbglYizNk9QSg5l9KP9jNNYKLT0K9Epwpz7wt-Zj8dZyfzWpzDyFzNwJyA4NWBfdDf611GLxb58SAWvFN1x6eLjtAXkNY-nPmF-sEnKwrl3_0kgrmj-pwEeLU5zxjMlW19mnErHqnmgE/s1600/Mario-Vargas-Llosa.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipcbglYizNk9QSg5l9KP9jNNYKLT0K9Epwpz7wt-Zj8dZyfzWpzDyFzNwJyA4NWBfdDf611GLxb58SAWvFN1x6eLjtAXkNY-nPmF-sEnKwrl3_0kgrmj-pwEeLU5zxjMlW19mnErHqnmgE/s400/Mario-Vargas-Llosa.jpg" width="342" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Intelectual poniendo cara de premio Nobel.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Es por ello que Mariano
Rajoy celebra la ruina de Grecia. Señala al nuevo partido como el principal de
todos sus males, como si antes sus coleguitas no hubiesen pulverizado su
administración política y económica. El españolito medio suspira, ay, qué
suerte de tener a Mariano, tan notario él, tan correcto, como un obispo o un
general, qué suerte. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Su mensaje de
austeridad iba dirigido a quienes han rescatado a los bancos y no se les ha
devuelto una perra gorda, a los que han sido desahuciados, a los que cerraron
su negocio de toda la vida, a los que el sistema sanitario tiró en una cuneta;
iba dirigido a los que tenían miedo. Antes les decía, cuidado con el lobo, coge
por aquí, corazón (por el camino austero, el correcto) y no te muevas, que
viene el lobo, es por tu bien. Y claro, vemos Grecia, y los más suspicaces entendemos
lo del lobo de otra manera. Mariano Rajoy es cómplice y por lo tanto culpable
del crimen que se está cometiendo con Grecia. A Tsipras no le ha quedado otra
que escapar de las Termópilas y entregar Esparta, se ha rendido, ni siquiera
tenía la posibilidad de morir dignamente en el intento. Su bajada de pantalones
responde a un acto de valentía. No puedo mancharme las manos de sangre, por más
que yo pueda morir, no dejaré morir al que considero mi pueblo. Varoufakis
también fue valiente: a estos hijos de la gran puta se les ha de hacer a lo
talibán, no queda otra, y se echó con chupa de cuero y moto, al monte Olimpo. </span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeasCfXL_ScCctjKg6krlrBP4evntAzdyut34uZsIsEf__GFBSP1122rGHNXPfttSptsjzpW2yoSm29dmFbIWqzszh6JCXWiUS2NOa4yYmgi3l4m7eLUPJ6Fo0sRmety3keNEM6qLaRLJd/s1600/varoufakis-dedo.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="250" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeasCfXL_ScCctjKg6krlrBP4evntAzdyut34uZsIsEf__GFBSP1122rGHNXPfttSptsjzpW2yoSm29dmFbIWqzszh6JCXWiUS2NOa4yYmgi3l4m7eLUPJ6Fo0sRmety3keNEM6qLaRLJd/s400/varoufakis-dedo.jpg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Vagancia y anarquía. Lo incorrecto.</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: "Times New Roman","serif"; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Deberíamos hacer algo
los españolitos de a pie. Echar cojones lo llamo yo. Pa variar el curso de la
Historia. </span><span style="font-size: 12pt;"><o:p></o:p></span></span></div>
Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5457996505544441660.post-89921561417045825922015-07-11T20:34:00.000-07:002015-07-11T20:34:58.390-07:00Sombras terribles<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto; text-align: center;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgA3_0BtV736Rtn56DPDOT9kVhc3YWU8iEGYcP-Ik98WI9BYInkrsLo2kS6HZkvejXXKYc8srfajEZMefwt3bPmbCM3eZToc1ws3TTTgLxvEMBio7f7bGjT2Vv-cHlvB3inHuAoBofN5VAM/s1600/El+sue%25C3%25B1o+de+la+raz%25C3%25B3n.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgA3_0BtV736Rtn56DPDOT9kVhc3YWU8iEGYcP-Ik98WI9BYInkrsLo2kS6HZkvejXXKYc8srfajEZMefwt3bPmbCM3eZToc1ws3TTTgLxvEMBio7f7bGjT2Vv-cHlvB3inHuAoBofN5VAM/s640/El+sue%25C3%25B1o+de+la+raz%25C3%25B3n.jpg" width="512" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">El sueño de la razón produce monstruos (1793-96). Francisco de Goya y Lucientes*</td></tr>
</tbody></table>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Existen sombras terribles. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">La sombra del Yo éste que es el Yo tuyo<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">y que no vive más que en las líneas <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">de lo que nunca ocurrió o que jamás vivirá. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Sombras y sombras, la infelicidad muriendo <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">en la bola de volframio y el papel <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">
de la infelicidad <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">apoyado en el muslo titubeante del no poeta, <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">del no cuentista, del no nadie nada inexistente. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Terribles son. Terribles manchas de vómito por
exceso, <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">como sombras: un oficio de la duda: la fragilidad: <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">el cuerpo incompleto insatisfecho anhelante de
verdades intangibles <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">en la sofocante poesía: la proeza de buscarse más
allá de lo posible. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Existen sombras terribles, mi amor. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Te regalo la mitad de casi nada, <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">la mitad de una mitad; <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">excrito tienes la otra mitad, <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">mi amor, tan culpable tú como el mundo. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Y el mundo: todo lo demás. No lo sabemos.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">No heredéis la sombra terrible. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Si no la habéis tomado ya de esta mano salvaje, <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">de esta boca salvaje, de este hombre primitivo, <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">de esta mano víctima y homicida, <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">de esta lengua de llama: siempre os he amado.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Ah, sí, sombras terribles en mi pecho <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">que es cada uno de los pechos. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">La sombra excrita de puño y sangre. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">
Por huir. Por lo llorado. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">La sombra terrible que te arranco <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">cuando follas como bailas <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">o bebes o sonríes. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both;">
</div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;">Existen sombras terribles.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: 'Times New Roman', serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: large;"><br /></span></span></div>
<i><div style="text-align: justify;">
<i>*Goya es el mejor grabador de la historia del arte español, junto a <a href="http://www.artehistoria.com/v2/personajes/3118.htm">Ribera</a>. A través de sus estampas, especialmente con los Caprichos, realizará una interesante crítica a la sociedad española de la <a href="http://www.artehistoria.com/v2/contextos/6.htm">Ilustración</a>. La serie de los Caprichos consta de 80 grabados realizados entre 1793 y 1796, poniéndose a la venta el 6 de febrero de 1799. Fueron ejecutados empleando aguafuerte y aguatinta pero la importancia de esta obra no radica en la realización sino en el contenido de sus imágenes, consideradas peligrosas para la época por su mordacidad. Toda la sociedad es criticada por el artista: la educación, la religión, la nobleza, la prostitución y un largo etcétera, por lo que intervino la Inquisición. Para evitar problemas con el Santo Oficio, Goya regaló las planchas y los ejemplares sin vender a <a href="http://www.artehistoria.com/v2/personajes/5601.htm">Carlos IV</a> a cambio de una pensión para su hijo Javier. El sueño de la razón produce monstruos iba a presidir la serie en un principio, relegándose al número 43 en la edición definitiva. El pintor cae rendido sobre su mesa de trabajo, rodeándole una serie de animales, sus propios monstruos y fantasmas. Con esta imagen querría indicarnos cómo la razón libera sus fantasmas durante el sueño, a través del subconsciente, por lo que se supone un anticipo del<a href="http://www.artehistoria.com/v2/estilos/69.htm">Surrealismo</a>. También podría aludir al deseo del artista por desenmascarar todos los monstruos de la sociedad a través de sus estampas, destacando así el poder de la razón sobre las tinieblas de la ignorancia, filosofía característica del pensamiento ilustrado. Fuente: <a href="http://www.artehistoria.com/v2/obras/1793.htm">http://www.artehistoria.com/v2/obras/1793.htm</a></i></div>
</i>Eduardo Floreshttp://www.blogger.com/profile/01188642019063807216noreply@blogger.com0